Control de la enfermedad, mejora genética y elegir los lugares de plantación: la fórmula de Chile para combatir la enfermedad de las bandas en el pino
FORESTAL
La Fundación Arume celebro una nueva jornada de Piñeiros, en la que también se presentaron ejemplos de construcción en madera en viviendas de promoción pública
29 oct 2025 . Actualizado a las 09:40 h.La enfermedad de las bandas, que está afectando a una amplia extensión de pinares de radiata en el interior de Galicia, era uno de los ejes centrales de Piñeiros 2025, la jornada sobre los retos del sector forestal gallego que todos los años organiza la Fundación Arume en la Cidade da Cultura. Allí, expertos de Chile y Uruguay, países invitados a esta edición, pusieron sobre la mesa una serie de propuestas para combatir estos hongos y que pasan, sobre todo, por lograr la mejora genética de las plantas y que estas sean más resistentes a las enfermedades, y por buscar especies alternativas, como puede ser el pino taeda. El otro gran tema de esta sesión fue la construcción en madera, donde se presentaron ejemplos de viviendas de promoción pública que Galicia podría importar.
Explican desde Arume que estos son dos temas clave para el futuro de la cadena forestal. En Galicia existe actualmente mucha preocupación por la sanidad de las coníferas, afectadas por las bandas. Piñeiros trajo a expertos en la materia con el objetivo de conocer líneas de trabajo internacionales que puedan servir de aprendizaje para Galicia. Así, el subgerente del Centro de Excelencia Chile, Rodrigo Ahumada, apuntó la necesidad de avanzar en tres campos. El primero es el control de la enfermedad. El segundo, la selección genética, para ganar en resistencia a los hongos. Y el tercero pasa por la definición de modelos re riesgo, en función de variedades climáticas y ambientales, con el objetivo de determinar qué zonas son las más adecuadas para las plantaciones futuras de radiata.
Otra de las opciones que se puso sobre la mesa fue la de valorar el uso de una especie alternativa, como el pino taeda, que en los últimos años se está introduciendo en Galicia. En este sentido, el director del centro Inia Tacuarembó de Uruguay, Juan Pedro Posse, explicó la experiencia de este país con el pino taeda, un árbol que comenzó a implantarse en este país de forma importante hace tres décadas. Actualmente, hay 14.000 hectáreas de esta especie, lo que representa un 90 % delas masas de coníferas de Uruguay. Posse destacó que se trata de una especie plástica, con un amplio rango de distribución y que presenta propiedades satisfactorias para la industria, tanto físicas como mecánicas y químicas.
Como recomendaciones, apuntó a la necesidad de afinar en la elección de materiales genéticos y de los emplazamientos adecuados para la plantación, así como definir el modelo silvícola que mejor se adapte a Galicia. El taeda es una especie que crece bien en suelos ácidos y no encharcados, como los habituales en Galicia, pero en la que es importante un control de la vegetación de competencia en los primeros años.
La mesa sobre sanidad vegetal la completó Carlos Iglesias, de Finsa, que analizó la situación de las masas gallegas de pino radiata afectadas por las bandas. En este sentido, apuntó al riesgo de regresión de estos pinares en Galicia y señaló los caminos para afrontar la enfermedad. En el corto plazo, estos pasan por tratamientos preventivos y por el manejo silvícola, mientras que a largo plazo hay que apostar por la selección genética de los árboles más resistentes a las bandas. Otra opción que planteó es la de usar coníferas alternativas, como el taeda, y el estudio de zonas de bajo riesgo para la plantación de radiata, pues esta especie sigue siendo interesante para Galicia, añadió.
La construcción de viviendas en madera, o con estructuras híbridas de madera y hormigón, fue otro de lo focos principales de este encuentro. Aquí participaron reputados profesionales, tanto de Latinoamérica como de España, como la arquitecta Cazú Zegers. La mesa de la madera se orientó a conocer las tendencias de trabajo que imperan en España y en otros países y de las que Galicia puede tomar ejemplo, Es el caso de Nasuvinsa, una sociedad pública autonómica y un ejemplo de cómo la madera se está introduciendo en las promociones públicas de vivienda, Maitane Zuazu, de Nasuvinsa, presentó una serie de edificios de viviendas que ya se construyeron en Navarra usando distintas técnicas de madera, como el CLT o el entramado ligero, y otras mixtas
Un elemento común de todas las intervenciones fue el de señalar las ventajas ecológicas de la construcción en madera. Así, Juan Antonio Gómez Pintado, presidente del grupo Vía Ágora, destacó la menor huella de carbono de la madera, así como el ahorro energético que produce, su posibilidad de reciclarse y la prefabricación y el montaje en seco en obra, lo que agiliza los plazos de espera.
Piñeiros 25 se cerró por la tarde con una mesa sobre el papel cultural del pino, en la que participaron las fundaciones Castelao y Eduardo Pondal y Astilleros Catoira, empresa que mantienen la tradición de la carpintería de ribeira gallega.