Karim destroza dos bateas y deja un reguero de daños en viveros de Arousa

Demasiado viento, demasiado mar de fondo y durante demasiadas horas. Ese cóctel, que llegó a la ría de Arousa de la mano de Karim, ha ocasionado daños en la legión de bateas que pueblan este mar. Dos de ellas, situadas en la zona de O Grove, en la boca de la ría, acabaron hechas añicos. «Siniestro total», decía ayer el presidente de Amegrove, Francisco Padín. Los pedazos de una de esas mejilloneras llegaron el domingo hasta A Illa de Arousa, donde acabaron en las piedras de la zona de Gradín. Los efectivos de Salvamento Marítimo que se trasladaron al lugar creen que los restos que allí encontraron pertenecían a la misma batea que otros hallados el día anterior en otro punto distinto de la ría.

Karim parece ser responsable, también, de que dos bateas se soltasen y navegasen a la deriva por la ría durante el fin de semana -aunque sin mayores consecuencias-, y del reguero de vigas rotas y cuerdas perdidas que se cuentan por toda la ría. «Houbo moitas avarías», explican desde diversas entidades del sector, cuyos socios salieron ayer en masa para revisar el estado de sus viveros. Queda por ver qué ha pasado debajo del agua, de comprobar si ha habido desplomes o, más bien, qué alcance tendrán estos. «Foise moita cría», aseguraba Fernando García, de Illa de Arousa. Y en ese mismo sentido se expresa Padín: «Mexillón grande, por sorte, xa queda pouco nas bateas e aínda que houbo desprendementos, o peor é a cría que se foi».

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