Patrocinado por:

Informática-Ficción

David Bonilla

OCIO@

Hugo Tobio

La Informática suele ser representada de forma más o menos estereotipada en obras literarias y audiovisuales, hasta caer en lo esperpéntico y la comicidad involuntaria.

10 ago 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Seamos sinceros, la Informática es una industria apasionante —y, para muchos de nosotros, el mejor trabajo del mundo—, pero no es especialmente trepidante. Nosotros casi nunca contamos con ese «momento clave» —el testimonio inesperado en un juicio, el descubrimiento sorprendente en un reportaje de investigación o la detención de los sospechosos de una investigación policial— que pueda provocar un giro de trama. Ninguna de las tecnologías que han cambiado el mundo, ninguna de las startups que crearon servicios que transformaron para siempre nuestro día a día, se construyeron de la noche a la mañana —en un momento de inspiración— sino a base de trabajo paciente y constante.

Tampoco ayuda a novelar nuestro sector el hecho de que la Informática moderna sea una actividad coral, un verdadero trabajo en equipo. En los albores de nuestra profesión, pioneros como Turing, Conway, o Sinclair, hacían descubrimientos o aportaciones individuales que generaban un verdadero impacto, pero el desarrollo moderno de software y hardware involucra a decenas o miles de personas que se sirven y apoyan en el software y hardware previamente creado por otros.

La industria no suele generar esos protagonistas capaces de cambiarlo todo con una heroicidad... el abogado que descubre una prueba oculta para salvar a su cliente de la pena de muerte, la policía que llega justo a tiempo al lugar del crimen para evitar un asesinato. Hasta la figura más mesiánica e icónica que hemos creado, Steve Jobs, necesitó un ejército de ingenieros, diseñadores y marketers para hacer realidad su visión.  

Y no es que exijamos que se refleje nuestro modo de vida con una fidelidad extrema sino que el mismo no se distorsione hasta el punto de que no nos reconozcamos en el arquetipo y provoque vergüenza ajena. No nos importa que la novia de Dustin en «Stranger Things» programe en C# —un lenguaje que se lanzó 14 AÑOS DESPUÉS de la época en la que transcurre el episodio— sino escenas como aquella en la que dos técnicos del Servicio Naval de Investigaciones Criminales (NCIS) intentan hacer frente a un ataque informático… escribiendo ambos en un mismo teclado.

Hay cientos de películas y series con una representación atroz de la Informática, así que, he seleccionado un ignominioso TOP 5 ciñéndome a aquellas cuya temática principal gira alrededor de la Informática:

  • El Cortador de Cesped (1992). Una de las primeras películas sobre Realidad Virtual que va de idiotez a idiotez. En teoría está basada en una historia corta de Stephen King, aunque solo conserva el título, así que, King les demandó para evitar que su nombre se asociara con semejante truño.
  • Virtuosity (1995). Un bodriazo que cuenta con un Russel Crowe que aún estaba intentando hacerse un hueco en Hollywood como villano: una IA diseñada a partir de las personalidades de 200 criminales reales —incluyendo a Hitler— que de alguna manera consigue desarrollarse en la vida real. Suena mal y la realidad es PEOR.
  • Operación Swordfish (2001). Toda la película es un disparate, pero solo por la escena del hacking con cuenta atrás de 60 segundos al que se somete al protagonista, mientras le apuntan con una pistola y, al mismo tiempo, practican sexo oral, ya merece un lugar en esta lista.
  • Los Becarios (2013). Cuando la empresa en la que trabajan quiebra, dos vendedores de relojes deben buscar un nuevo trabajo a toda prisa y consiguen entrar como becarios en Google ¿por qué no? Como publirreportaje es malo, pero como película cómica es atroz.
  • El Círculo (2017). Una metáfora de brocha gorda y bajo presupuesto sobre la cantidad de información personal que recogen las grandes compañías tecnológicas. Desgraciadamente, el guion es más previsible que el voto de un diputado y está lleno de agujeros que intentan tapar con un deus ex machina de libro, en forma de hackeo omnímodo de absolutamente todos los datos de una gran megacorporación. Claro que sí guapi.

Por supuesto, también hay honrosas excepciones que reflejan con bastante verosimilitud el sector tecnológico y cómo se trabaja en el mismo. He confeccionado otro TOP 5 con obras más que dignas:

  • Juegos de Guerra (1983). Introdujo al gran público un montón de conceptos técnicos nuevos —como las comunicaciones entre ordenadores o la Inteligencia Artificial— además de transmitir un mensaje claramente antibelicista en una época en la que la tensión entre Estados Unidos y la Unión Soviética era máxima. Una de las películas que mas vocaciones técnicas ha creado.
  • Matrix (1999). Revolucionaria cuando se estrenó, sigue asombrando 23 años después de su estreno. La historia que cuenta es tan poderosa que, al visionarla, se puede pasar por alto el mimo con el que el guion incorpora conceptos informáticos avanzados.
  • Silicon Valley (2014). Una brillante serie sobre el mundillo estartapil, que refleja con tanta fidelidad como para incomodar a emprendedores e inversores reales. Uno de sus creadores, Mike Judge, trabajó como programador en una startup al principio de su carrera. «Silicon Valley» ES Silicon Valley.
  • Halt and catch Fire (2014). Documenta algunos de los momentos más icónicos de la industria del software, como el asombroso proceso que desembocó en la creación de los PCs clónicos. Serie fetiche para muchos.
  • Mr. Robot (2015). Una de las pocas series que refleja con fidelidad el campo de la ciberseguridad y —también— los problemas mentales de su protagonista. Contó con asesores técnicos de primer nivel y SE NOTA.

Pero más allá de la fidelidad técnica una obra audiovisual, lo que realmente debería preocuparnos es que las mismas reflejen el inmenso impacto que ha tenido y va a seguir teniendo la Informática en nuestra Sociedad. Que evangelicen nuestra profesión y generen vocaciones en un mundo donde la riqueza de las naciones la determinará su capacidad de desarrollar y explotar comercialmente el bien de consumo más rentable de la historia: el software.

Casi tanto como intentar consensuar una lista de las 5 peores o mejores. Cada uno tendrá su propia opinión; yo mismo he sufrido al no poder incluir —para bien o para mal— títulos como «La Red», «Hackers», «Tron», «Los Fisgones», «La Red Social», «Super Pumped», «We Crashed» o «IT Crowd». ¿Tú cuales habrías elegido?

Este texto se publicó originalmente en la Bonilista, la lista de correo de noticias tecnológicas relevantes para personas importantes. Si desea suscribirse y leerlo antes que nadie, puede hacerlo aquí ¡es bastante gratis!