Unos 16 millones de personas siguieron el estreno de la versión local de «Yo soy Betty la fea», producida por Salma Hayek
01 oct 2006 . Actualizado a las 07:00 h.Ni la agente Scully, ni Ally McBeal, ni Angela Channing. La nueva reina de la televisión norteamericana tiene rasgos latinos, lleva gafas de culo de vaso y pesa más de 50 kilos. Su nombre es Betty y el pasado viernes consiguió reunir frente a la caja tonta a más de 16 millones de espectadores en lo que supone un nuevo ciclo dentro de la historia de la programación estadounidense: el reinado del culebrón. Basada en la famosa telenovela colombiana Yo soy Betty la fea , emitida en más de 70 países, Ugly Betty es la última apuesta de la cadena de televisión ABC, cuyos éxitos incluyen series como Mujeres desesperadas o Perdidos . El argumento, como en todo serial que se precie, es la historia de una cenicienta de clase baja cuyo íntimo anhelo es conseguir un príncipe azul y ser la más bella de la fiesta. Betty, interpretada por la actriz de origen hondureño América Ferrero, es una chica poco agraciada pero de gran corazón que encuentra trabajo en una de las agencias de modelos más prestigiosas de la ciudad. Enamorada de su jefe, y perseguida por sus compañeras, la protagonista deberá superar todas las dificultades a golpe de músicas efectistas y mucho giro de guión. Unos ingredientes que, de momento, le han servido para convertirse en el programa más visto de la temporada, además de recibir el beneplácito de consagrados como The New York Times: «Ugly Betty es uno de los shows más divertidos del momento», afirmaba en una crítica la prestigiosa publicación. Promocionada hasta la saciedad y producida por la mismísima Salma Hayek, quien incluso representa un pequeño papel en el episodio piloto, el objetivo de la serie dista mucho de las intenciones altruistas de su protagonista, para con más de 40 millones de latinos en el país, cuyo poder adquisitivo se estima en un billón de dólares para el 2010. Cada vez más Betty es sólo la primera de decenas de telenovelas que en los próximos meses inundarán la parrilla televisiva en un intento por conquistar a los latinos de segunda generación, identificados con los gustos de sus padres, pero con una clara preferencia por el inglés. Entre los canales que se han pasado al culebrón se encuentran la NBC, que en estos momentos está versionando al menos una decena de éxitos de su filial hispana Telemando; CBS, que ha adquirido los derechos de varios culebrones venezolanos; o la conservadora FOX, cuyos postulados antiemigración no han interferido en su búsqueda de nuevos mercados. Además de conseguir llegar hasta un público desconocido hasta ahora, las telenovelas tienen un aliciente económico: cada capítulo cuesta una tercera parte de lo que se gasta en una producción típicamente yanqui. Por todo el mundo El éxito de las telenovelas no se centra sólo en Estados Unidos, ya que de hecho Betty se ha versionado para setenta países; y en España, por ejemplo, Telecinco emite la tercera versión que se ha hecho de la historia. La empresa de comunicación Informa Telecoms and Media realizó este verano un estudio en veinte países y se descubrió que el top ten de lo más visto incluía tres culebrones: Te voy a enseñar a querer, en el cuarto puesto; Inocente de ti estaba en el octavo y, justo después, ¡Anita, no te rajes! Sólo les ganaban CSI, Perdidos, 24, Mujeres desesperadas o Los Simpson , y eso da la medida de su éxito.