Las instalaciones de Husqvarna ya guardan hasta el domingo la réplica del Trono de Hierro hecha en madera
17 may 2019 . Actualizado a las 05:53 h.-Bienvenidos a Poniente.
Nanda Roca, Kalheesi de Márketing, saluda con un firme apretón de manos y gira la vista. Hace un día espléndido aquí, en el Norte. El invierno se aleja y el sol cae de pleno sobre los terrenos de Husqvarna en Ordes, donde luce el Trono de Hierro. Bueno, este, en realidad, es de madera.
Setenta kilos de mitomanía tallados en un tronco de pino por José Llorente, uno de los embajadores de la marca, que en un par de días talló con motosierras Husqvarna una réplica del trono más disputado de los últimos años y que se sorteará el domingo entre los seguidores de la marca en Facebook e Instagram. Por el momento hay inscritas cerca de 400 personas, que tienen que etiquetar a quién quieren ver en el trono y explicar por qué. La gente se está tomando en serio su razonamiento de quién tiene que reinar sobre los Siete Reinos.
Entre el departamento de márketing de Husqvarna hay teorías para todos los gustos. Cuidado. Los spoilers sobrevuelan la empresa. Y esta última semana, a punto de conocerse el desenlace, más. Mucho más.
-Yo creo que Tyrion.
-¿En serio? Yo sigo esperando a que sea Daenerys.
-¿Eres anti Jon Snow?
-Totalmente
-Es un lánguido.
-A ver, lo único que hace es así. Y lleva ocho años haciendo así.
«Así» es un gesto de chico atormentado con un intenso mundo interior. Más teorías. «Que Bran es el Rey de la Noche, o algo así. Bran tiene mucho que decir», opina Genma. «Bueno, no sé ni que decir, porque muy hablador no es». Más teorías. Esta vez es la de Ana Loureiro. «Cersei no está muerta». No puede ser que la villana más perfecta que han dado las ficciones desaparezca a golpe de cascote. No. ¿Y la Targaryen? «Yo creo que muere a los diez minutos». Claro que al final, van a ser todos Targaryen. Otra teoría más Tyrion es en realidad hijo del Rey Loco -venga de Targaryen- y se casa con Sansa. «Hubo match en Invernalia», bromea Sergio Ramírez, que, al lado del trono, con barba y melena, recuerda levemente al Khal Drogo, el que ayudó a la Madre de Dragones a acabar convirtiéndose en la Rompedora de Cadenas.
Así, alrededor del trono tallado por un hombre que en realidad nunca se sintió atraído por ese canto de sirena en que para muchos se ha convertido la Canción de Hielo y Fuego, se va embrollando más el embrollo, esperando a que llegue el fin de una era. «Yo me voy a levantar a las 3 de la madrugada», confiesa Genma. ¿El elemento disonante? Ana Vázquez. No es que le guste, pero sabe decir Dracarys igual de bien que todos.
«Somos muy seguidores de Juego de tronos», explica Roca, Kalheesi, mientras sus compañeras del departamento de márketing asienten. Dracarys, dicen, mientras se han agenciado un Drogon. Se llama Pablo y pone el humo en la escena con el trono. «La verdad es que llevábamos tiempo intentando hacer algo con la serie, como poner en el catálogo de invierno que Se acerca el invierno». La anécdota la cuenta Sergio.
Así que ahora, a pocos días de que por fin se sepa todo lo que queda por ocurrir en Poniente, Ordes se ha convertido en Desembarco del Rey. El trono, que tiene un tamaño más reducido que el original para que pueda tenerse en un piso, se irá con el que dé la mejor razón para dirigir los siete reinos. Y esta vez no importan los apellidos.
