Un señor, un joven veterano, un hombre de fútbol

Millán Gómez Pérez

TORRE DE MARATHÓN

17 nov 2017 . Actualizado a las 12:56 h.

Tuve el placer de trabajar con Dani Mallo durante dos temporadas en el Club Deportivo Lugo. Un profesional ejemplar. Siempre proactivo. Disfrutaba entrenando. Jugase o no jugase, era el mismo. Su actitud solo mejoraba. Se dedicaba a su pasión en una demarcación solitaria.

Cuando yo era un crío, lo vi jugar en el Dépor. Incluso, titular en Riazor frente a todo un Manchester United en Champions League. Seguí su evolución en el extranjero. Vivimos tiempos donde el futbolista español emigra. Hasta hace apenas unos años, no era lo habitual. Fue un pionero cumpliendo la máxima de Castelao. En 2006, cogió la maleta para marcharse a Braga; dos años después a Falkirk, en Escocia. Llegó a jugar una final de Copa en el mítico Hampden Park, donde dicen que se vivió el mejor partido de la historia del fútbol. Le mueve y le movía la pasión por la redonda. Nunca imaginé ser su compañero.Y lo fui.

Siempre un gesto ayudando a sus compañeros. Desde el banquillo, uno de los primeros en animar, en aportar, en consolar, en celebrar. Cuando viajábamos en pretemporada y se enfrentaba a jóvenes porteros, les regalaba sus guantes. Actos ejemplares y ejemplarizantes. Dotado de un sentido de humor importante, poseía un saco sin fondo de chistes en los grupos de WhatsApp.

Profesional fuera del verde. Siempre presto a atender a los medios de comunicación, sabedor de que su oficio no se limita a las dimensiones del campo. Portavoz impecable de club. Jugó en Portugal, se mimetizó allí; en Escocia, ídem. Jugó cuatro años en Girona y aprendió catalán. Hasta el punto que un periodista catalán me comentó que pensó siempre que era catalán. En su primera temporada en Lugo, perdimos 6-0 en Girona. Dio la cara en zona mixta como yo le pedí. Pidió perdón a la afición lucense.

A nivel deportivo, actuaciones sobresalientes como aquel domingo en Soria. Aluvión del C.D. Numancia. Paró todo lo habido y por haber cuando el equipo encadenaba siete jornadas sin ganar. Enzo terminó su trabajo con un gol en el último minuto. Clave en el fantástico inicio de Liga 2013-2014. También, fundamental en el comienzo de segunda vuelta del campeonato 2014-2015 recuperándonos de ocho fechas sin vencer. Se retira como jugador, pero el fútbol lo necesita y lo seguirá necesitando. Transmitirá sus conocimientos a los más jóvenes y a los veteranos. La pelota no se detiene. Sigue rodando. Te quiero siempre en mi equipo.