Los problemas crecen para el Deportivo

TORRE DE MARATHÓN

CESAR QUIAN

A pocos días de recibir al Zaragoza, Competición sanciona a Saúl; Carlos Fernández y Cartabia son baja segura por lesión; Caballo, Valentín y Simón no se entrenan con molestias; y Dani recibe un fuerte golpe en un glúteo

13 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Bromeaba hace algunas semanas Natxo González con el hecho de que las esporádicas lesiones y las sanciones que iban arrastrando sus jugadores le estaban permitiendo llevar a cabo un sistema de rotaciones nada traumático. Casi todos iban entrando en la rueda de cambios, apenas había descontentos, y el nivel exhibido por la mayoría era elevado.

Sin embargo, aquel «todo está planificado» con el que sonreía se ha convertido ahora en un problema que crece sin saber donde puede estar el limite.

A cuatro días de que el Zaragoza se presente en el estadio de Riazor, el conjunto que prepara Natxo González podría quedarse hasta sin siete jugadores, después de que Dani Giménez sufriera un fuerte golpe en un glúteo, que le impidió entrenarse ayer con sus compañeros. Según la evolución que presente el dolor, podría ejercitarse hoy, disipando de esta manera cualquier duda, o mantener la alarma encendida.

Porque ayer fue una jornada de malas noticias para los blanquiazules. Además de las molestias del portero, el Dépor se encontró con que el Comité de Competición desestimó las alegaciones presentadas para que le retiraran a Saúl la segunda tarjeta amarilla vista el pasado fin de semana contra el Numancia.

El club va a Apelación por Saúl

Según informó ayer el Deportivo, el citado comité considera que «no puede concluirse que lo recogido en el acta sea fruto de un error material manifiesto susceptible de desvirtuar la aludida presunción de veracidad (...). Debe por lo tanto prevalecer el contenido del acta redactada por el colegiado cuya apreciación debe gozar, como acaba de explicarse, de una presunción de veracidad que no decae por la mera discrepancia». De todos modos, el club anunció anoche que interpone recurso ante Apelación par aintentar que juegue el domingo ante el Zaragoza.

A Saúl se le unirían dos futbolistas más como bajas seguras. Se trata de Carlos Fernández y Fede Cartabia, que se encuentran en fase de recuperación de sus respectivas lesiones. El primero sufre un problema en el bíceps femoral de su muslo izquierdo, mientras que el argentino está aquejado de una lesión muscular de grado uno en el derecho.

Y con Dani Giménez rezando para que su dolor remita, y tres ausencias confirmadas, otros tres futbolistas no se han ejercitado en toda la semana con lo que para nada está garantizado que puedan estar para el domingo.

Conflicto en el lateral

Se trata de tres laterales, que en caso de no jugar dejarían los dos costados blanquiazules bajo mínimos. Gerard Valentín y Diego Caballo llevan desde el sábado aquejados de sendas contusiones fruto de una fuerte entrada del catalán al salmantino en el último entrenamiento de la semana. El percance impidió al zurdo vestirse ante el Numancia, pese a que había entrado en la convocatoria de 20 jugadores elaborada por Natxo González. Tampoco lo hizo el gerundense, aunque en este caso es previsible que tampoco lo hubiera hecho en caso de estar sano.

El último de los futbolistas con los que Natxo todavía no sabe si podrá contar es David Simón. El canario arrastra problemas en la zona de los isquiotibiales que no le permiten ejercitarse. Tras someterse a pruebas médicas, estas no desvelan nada, pero él sigue sufriendo un molesto dolor que parece difícil que le permita llegar al domingo. De confirmarse estas ausencias, los terceros laterales de cada banda ?Bóveda y Dubarbier? tendrían que ocupar un puesto en el once. En la zurda, parece poco probable.

La bajada de temperaturas convierte al actual momento en el peor del ejercicio

¿Existe alguna explicación más o menos lógica de por qué un equipo que apenas había tenido una decena de lesiones en los primeros tres meses de competición, se haya juntado ahora con varias de golpe? La bajada de temperaturas parece ser uno de los motivos de esta coincidencia.

A Coruña mantuvo una idílica primavera hasta mediado el mes de noviembre, con algunos fríos días de excepción en medio. La bajada de temperaturas desde entonces y las lluvias han jugado en contra de los blanquiazules.

El partido contra el Club Atlético Osasuna, con un campo totalmente encharcado pasó factura a los gallegos, que una semana después tuvieron que afrontar un partido en un terreno también en malas condiciones como fue el del Cerro del Espino, en Majadahonda. Entretanto, la ciudad deportiva de Abegondo también sufrió estos días el castigo del las inclemencias y todo eso ha ido mermando poco a poco a los jugadores blanquiazules.