El Córdoba le apoyan unos números que impresionan y la confianza de unos jugadores sin duda estimulados por la gran racha por la que atraviesan. Sin embargo, es improbable que el conjunto andaluz acuda a Riazor en plan gallo porque este es un campo que sigue imponiendo respeto a cualquier rival. En cualquier caso, si se mide al Deportivo sintiéndose favorito, el beneficiado será el conjunto coruñés.
Y es que mientras Óscar Cano centra el discurso en su propuesta habitual, con la posesión como eje, en sus primeras semanas al frente del equipo se ha visto obligado a matizarlo en favor de un modelo mucho más pragmático. Ha apostado por jugar más protegidos, minimizando las concesiones, y a partir de ahí generar peligro cuando los encuentros van madurando.
Lo sucedido en el Fernando Torres fue un ejemplo de ello. Mientras se mantuvo el once contra once, el Dépor se concentró en reducir al rival. A partir del gol y especialmente de la expulsión de Diamé, se logró el control definitivo del choque y generar espacios a través de la posesión.
El conjunto blanquiazul aún no ha alcanzado su nivel óptimo, pero lo está teniendo en cuanto a resultados y efectividad. Si se suma la buena imagen frente a la Cultural con la efectividad de Fuenlabrada, permite ser optimista de cara a este tramo tan importante antes del parón por las vacaciones.
Para empezar, Cano cuenta ya con un once tipo. Arrancando en el portero y terminando en el punta, apenas hay dudas acerca de quién formará como titular. Frente al Córdoba, aún habrá que ver si será Pablo Martínez o Jaime Sánchez quien acompañe a Adrián Lapeña. El primero parte con ventaja si se pretende mantener lo que en las últimas citas ha funcionado bien.
Quizá el debate alcance a Diego Villares, en caso de que se recupere, pero pese a reconocerle su condición de futbolista más destacado en el inicio de la temporada, ahora hay un trivote que mezcla de forma muy positiva en todas las fases del juego. Sería razonable que al canterano le toque esperar.
En vista de esto es más que probable que el míster repita alineación en una cita de gran valor. Sin embargo, mal haría el Deportivo en centrar la vista solo en el Córdoba. El grupo es muy fuerte y los candidatos al ascenso directo son mucho más que el próximo rival.