El proyecto de la Diputación propone una reforma integral del estadio que incluye las gradas de Marcador y Gol
27 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Moderno, operativo, accesible y funcional. Así asegura la Diputación de Pontevedra que será Balaídos si se acomete la reforma que propone. Este proyecto no es novedoso, el estadio municipal cuenta ya con una larga trayectoria, tres décadas ni más ni menos, de buenas intenciones. Los 120 millones que propuso invertir Santiago Domínguez en el 2010 o los 70 millones que el Partido Popular estimó en el 2012 superan con creces los cálculos que ahora estima el Concello, según los cuales habrán de invertirse 8 millones. Ayer, la Diputación dio a conocer su alternativa, complementaria de la del Ayuntamiento, valorada en 25 millones.
Para completarlo, según el presidente del gobierno provincial, Rafael Louzán, tendrían que implicarse también el Concello y la Zona Franca. Si el Ayuntamiento plantea reformar Río y Tribuna, rehabilitar los servicios de estas dos gradas centrales y reforzar la seguridad en los accesos, además de renovar su apariencia exterior, la Diputación quiere que, además, se reformen las gradas de Marcador y Gol. Habría que reconstruir estos graderíos y colocarlos más cerca del terreno de juego. Esto obligaría a invertir 9 millones más en cada extremo, que se suman a los 6 que invertiría el Concello y los 2 del Celta según el proyecto municipal. Por lo tanto, la alternativa de la Diputación complementa la municipal.
Por eso, Louzán aseguró ayer que es más «ambiciosa». Responde, aseguró, al objetivo de dar a la afición un campo «digno do clube máis representativo de Galicia». Su propuesta, subrayó el presidente de la Diputación, «máis global».
«Queremos que la presión de los aficionados llegue al juego», explicó el vicepresidente de la Diputación, José Manuel Figueroa, también portavoz del PP en el Concello. Esta «dignificación» del estadio podría ejecutarse en tres años, plazo durante el cual, las jornadas de liga paralizarían las acometidas, algo que ya se hizo en la remodelación de otros estadios gallegos como el de Pasarón, en Pontevedra.
Para lograr la colaboración de la Zona Franca y conseguir los 25 millones de euros que cuesta completar el proyecto, Louzán anunció ayer que el miércoles se reunirá con el organismo.