Uno de los hijos del fallecido relata junto al vecino que encontró el cadáver de su padre las circunstancias del crimen
09 ene 2019 . Actualizado a las 11:31 h.Manuel Rivas es uno de los cinco hijos del Manuel Rivas asesinado en los últimos días en Vigo. Con una bolsa en la cabeza, con los pies atados por un cinturón y cubierto de trapos, plásticos y cañas se escondió su cadáver. Manuel, conocido por Noli, también es vecino de la zona, amigo de la familia del difunto y la persona que encontró el cuerpo ensangrentado de este vecino de Vigo de 81 años.
«Esto no lo hace un delincuente cualquiera. Fuimos muchos vecinos, yo con un sobrino. Buscamos por el río, pensé que cayera por un camino estrecho, que le diera un mareo. Pero no, pasamos al lado y vimos algo raro. Tenía los pies atados con un cinturón, la bolsa en la cabeza y trapos, plásticos viejos y muchas cañas cubriendo el cuerpo totalmente camuflado», explica Noli, cuya casa está a 200 metros de la vivienda del fallecido. Allí, en un solar con dos casas, residía este octogenario. En la otra, uno de sus cinco hijos, también de nombre Manuel, explica que «al morir mamá, que era su mástil, papá empeoró mucho». La mujer falleció el pasado 1 de noviembre tras una larga enfermedad que, en los últimos tiempos, sobrellevó en la casa de otra hija para estar mejor atendida.
«Él perdió la cabeza, iba con fajos de billetes, muchos, 10.000 o 15.000 euros. En Navidad le llevó 15.000 a una hija que se los guardara, decía que ‘los bancos iban a quebrar’. Manuel admite que esos bolsillos cargados de dinero en metálico no tardaron en darse a conocer en la zona, de ahí, tal vez, lo ocurrido. «La gente lo sabía, él lo sacaba y fardaba por ahí de dinero. Sacaba fajotes, tacos, decía que tenía novias, decía ‘vou xunto delas’. Pero eso, creo yo, era una fantasmada, aunque con tanto dinero nunca se sabe».
