Un asesor inmobiliario alerta de que la «guerra» entre Concello y Xunta frustra el inicio de obras
17 sep 2021 . Actualizado a las 22:16 h.Algunas sociedades cooperativas que aspiran a construir pisos, adosados y chalés en la segunda fase del polígono de Navia denunciaron ayer que la «guerra» entre el Concello de Vigo y la Xunta empantana y «bloquea» el desarrollo urbanístico del proyecto que prevé construir 1.600 nuevas viviendas protegidas. Un indicio es que la Gerencia de Urbanismo ha solicitado al Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS) que rectifique nuevas deficiencias que observa en el plan después de que el Gobierno autonómico hubiese solventado las anteriores modificaciones. El administrador inmobiliario José Manuel Pérez, asesor de la cooperativa de Navia Siglo XXI, no oculta su enojo. Teme que estos «bloqueos» hundan las expectativas e «ilusiones» de cientos de aspirantes inscritos en las listas de espera. Las cooperativas tienen gastos y algunos clientes ya están adelantando dinero.
En el sector hay nerviosismo. Temen que el Concello siga ralentizando el proyecto, que transformará 250.000 metros cuadrados de suelo en una urbanización de bloques de pisos de baja altura, chalés y adosados.
«Se crean expectativas y, al final, un señor en la plaza do Rei bloquea todo y no se hace nada. Se frustran las ilusiones y el retraso y el enfrentamiento político no ayudan. No es de recibo que el Concello paralice el inicio de las obras, es algo que debería estar resuelto en tres meses, la Xunta ya lo presentó. Salimos todos perjudicados, unos gastamos dinero en el desarrollo y otros ven defraudadas sus expectativas», dice el mismo asesor de cooperativistas.
Teme que la nueva petición de rectificaciones, después de cumplir otras anteriores, tenga una intención dilatoria y de «bloqueo» del inicio de las obras de Navia. Dicho veterano promotor del sector cooperativista recalca que la ley es que la administración municipal notifica un único paquete de aspectos que hay que corregir en el planeamiento y que no remita una nueva cada vez que la oficina autonómica cumple la exigencia anterior. Por ello, entre algunos cooperativistas hay malestar porque ven cómo el inicio de las obras de urbanización se eterniza. Se ven abocados a «presionar» para que el proyecto arranque de una vez por todas. «Están usando la táctica de marear la perdiz, no pueden hacer esto de pedir arreglar deficiencias una y otra vez, se hace todo de una vez», comenta el administrador inmobiliario
Pérez fue un pionero del desarrollo del polígono de Navia hace 28 años y está preocupado por la lentitud de la licencia. Recuerda la tardanza con la que se aprobó el plan parcial del polígono que estuvo en la cuerda floja a causa de la aprobación de un instituto de secundaria, sin construir.
Según fuentes próximas al IGVS, existe la sospecha de que el Concello no tiene interés en otorgar la licencia. Este malestar se remonta al menos al 2020, donde ya se hicieron críticas similares por la lentitud de la tramitación de este proyecto al que se han inscrito entre 100 y 150 cooperativistas en un proyecto que ha obtenido permutas, 651 en otro privado y otros 500 en otro de la federación vecinal. Muchos de los solicitantes se solapan porque se inscriben en varias listas.
«Hay muchos gastos, alguna gente ya está pagando y hay expectativas con estas viviendas», dice el asesor de Navia Siglo XXI. La promotora ya ha sondeado al Defensor del Pueblo para preguntar por qué no se aprueba el inicio de las obras. «Detrás de esto hay una batalla política y nosotros estamos en el medio», dice el cooperativista. Su inmobiliaria ya está celebrando reuniones desde este mismo mes con grupos de inscritos en su lista. Sus objetivos son construir 100 viviendas con la edificación permitida y, si se puede, irán a por 50 más. «No creamos falsas expectativas ni buscamos captar gente ni pedimos dinero a fondo perdido», afirma.
«La gente tiene un poco de desesperación», avisan desde la Federación Veciñal
El medio millar de cooperativistas inscritos en la lista de la Federación de Asociacións Veciñais de Vigo Eduardo Chao también se han puesto nerviosos. «La gente tiene un poco de desesperación», avisa la presidenta de la Favec, María Pérez, consciente de que los retrasos impacientan a los aspirantes a una vivienda protegida en pleno Vigo y el entorno de Samil.
«Tenemos 500 inscritos y vamos cerrando gente por parcelas para que nadie quede fuera. Siempre que consigamos parcela, algo que siempre decimos a los interesados y reflejamos en el contrato», dice la presidenta. Admite que hay «mucha» preocupación de los inscritos porque las obras no arrancan y no se sabe cuánto van a tardar.
Casas postpandemia
El proyecto de la nueva fase de Navia apuesta por un modelo de urbanización con bajas alturas, adosados y casas unifamiliares dotado de espacios verdes, paseos y carril bici. Al contrario que el primer polígono, la ampliación de Navia tendrá una baja densidad de población y se integrará en el barrio rural de San Paio.
Algunos proyectos de los cooperativistas muestran auténticos chalés de un bajo y planta, con garaje anexo y un pequeño jardín. Han sido rediseñados para los gustos de los residentes de la postpandemia del covid, donde los moradores prefieren amplios ventanales con mucha luz, así como espacios abiertos con terrazas y jardines.
Consultado ayer el IGVS sobre la situación de parálisis actual en el desarrollo e inicio de las obras de Navia, por el momento la Xunta quedó a la espera de dar una respuesta.
