Caballero se lanza al ataque contra los tres proyectos clave de la Xunta

Juan Manuel Fuentes Galán
juanma fuentes VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

M.MORALEJO

El alcalde aprovecha la preocupación del PP a un año de las elecciones

15 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Ignacio López-Chaves, nuevo delegado de la Xunta, tomó buena nota de los deberes que le trasladó el martes su superior, el vicepresidente del Gobierno gallego. Alfonso Rueda señaló las tres apuestas autonómicas en Vigo que no están dando los resultados previstos: el Área Metropolitana, el nuevo hospital y la Ciudad de la Justicia.

Pero si el nuevo delegado de la Xunta anotó bien el encargo a un año de las elecciones autonómicas, también lo hizo una persona que ni siquiera estaba en la sala y que provoca no pocos quebraderos de cabeza al Ejecutivo autónomo. Abel Caballero se ha referido desde entonces a las tres cuestiones y en todo momento profundizando sus críticas a la gestión de Alberto Núñez Feijoo.

El endurecimiento del discurso del regidor socialista quedó patente ayer, cuando cuestionó la voluntad de la Xunta de poner en marcha el Área Metropolitana. «Las conversaciones del director xeral de Administración Local con los alcaldes son para atacar a Vigo y hasta aquí llegamos. La Xunta dice que sí, pero no quiere el Área de Vigo y trata de reconducir la situación al bloqueo anterior, pero no le vamos a dejar», advirtió.

Ante los periodistas reconoció que Feijoo le ofertó en julio que pusiera la nueva estructura supramunicipal en marcha y luego se introducirían cambios, pero lo rechazó. «¡Ya les gustaría! Vigo no se va a sentar nunca en una junta de gobierno en el que su gobierno tenga el mismo peso que Fornelos», enfatizó.

Para resolver el conflicto existente, Caballero recalcó que va a hablar con «el resto de los alcaldes serios y sensatos para debatir el peso que debe tener cada municipio en el Área. Tampoco es bueno que Pazos de Borbén tenga el mismo que Redondela», señaló. Entiende el alcalde vigués que «Vigo ha hecho una cesión» al aceptar una representación del 45 % cuando tiene el 62 % de la población. También al asumir que cualquier decisión «tienen que tomarla al menos cuatro ayuntamientos. Que no sea suficiente con Vigo y Cangas o Vigo y Redondela aunque superen el 50 %». Su conclusión es que «Feijoo no quiere el Área Metropolitana ni que valga la reunión que mantuvimos, pero acabará valiendo».

Y si este es su análisis con el futuro ente metropolitano, todavía más crítico es el que realiza sobre el nuevo complejo sanitario. Ayer aludió directamente al «desastre en que se está convirtiendo», poniendo en el centro de sus críticas el pago obligado del párking. «En un hospital se sabe cuándo se entra, pero no cuándo se sale. Y si el precio del aparcamiento es prohibitivo se convierte en un copago sanitario. El usuarios forzosamente tendrá que llevar dinero para pagar, y si no lo tiene no podrá salir de allí».

Su solución es que el nuevo conselleiro «decrete su gratuidad, pero se lo dije hace una semana y todo está igual». Mientras tanto, el Concello sigue con su plan de construir un párking alternativo de acceso libre. En el momento en el que empiecen las obras colocará en un brete al Gobierno gallego ya que la portavoz del PP, Elena Muñoz, se ha comprometido a gestionar con la Xunta la gratuidad del polémico aparcamiento mientras dure la construcción del municipal.

Al contrario que con el Área y el hospital, las cosas discurren mejor en lo relativo a la Ciudad de la Justicia. El Concello cederá los terrenos en unas semanas y Rueda ha prometido fondos y la convocatoria del concurso para construirla. Pese a este acuerdo, Caballero no duda en acusar a la Xunta de «chantajear y esquilmar a la ciudad» por exigir al Concello la entrega de los terrenos para hacer una obra que lleva años de retraso por las discrepancias entre ambas partes.

la confrontación política

El consenso de julio se esfuma sin que haya dado resultados

24 de mayo y 6 de julio. Son las dos fechas sobre las que pareció cimentarse una normalización de relaciones entre el Gobierno gallego y el municipal. La primera fue decisiva ya que confirmó que Caballero era un actor imprescindible al haber obtenido un apoyo ciudadano sin parangón en las áreas urbanas de Galicia. La segunda, consecuencia de la anterior, fue una reunión negociadora en el que Feijoo reconoció el estatus del regidor vigués. En ella ambas partes pactaron la resolución de los conflictos pendientes (hospital y política aeroportuaria excluidos), pero el paso del tiempo está desdibujando el espejismo del supuesto consenso.

El tema clave de la reunión fue el Área Metropolitana, pero cuando están a punto de cumplirse los 100 días del encuentro de ambos líderes amenaza con embarrancar. Caballero tardó semanas en enviar su propuesta, agosto se dio como tiempo muerto y llegado septiembre lo único que hay es el inicio de una ronda del director xeral de Administración Local con los 14 alcaldes que no finalizará hasta diciembre. Un plazo excesivo para Caballero que ha desenterrado el hacha de guerra.

Si eso pasa con el tema estrella, el que más urgía para que funcione el Área Metropolitana antes de las elecciones autonómicas del 2016, del resto de los asuntos pactados nada de nada. Se acordó una comisión técnica para definir las características de la estación intermodal del AVE, estudiar la cesión de la gestión del río Lagares al Concello o la construcción de dos túneles de Beiramar (delante del puerto pesquero y en Julián Estévez) que llevan años proyectados.

Podría ser que estos asuntos reaparezcan vía Orzamentos del 2016, año electoral, pero en los 96 días transcurridos desde el 6 de julio ninguna de las partes ha vuelto a mencionarlos de forma pública.