«Compito por Portugal porque aquí hay escasez de bailarines»

Begoña Rodríguez Sotelino
begoña r. sotelino VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

M.MORALEJO

La viguesa Carmen Vila acude este fin de semana al Campeonato del Mundo de Baile Latino con un compañero de Oporto

15 oct 2018 . Actualizado a las 09:24 h.

Hace casi 20 años que Carmen Vila cambió la peluquería por el baile. La viguesa invertía el poco tiempo libre que le dejaban las cabezas ajenas en mover todo el cuerpo al ritmo de la música y se convirtió en una de las mejores en la especialidad de baile latino. A sus 52 años sigue estando en la élite pero la escasez de bailarines la dejó sin el par necesario para estas lides. La danza es un lenguaje universal sin fronteras. Encontró el acompañante que necesitaba en Oporto junto a él, la viguesa compite por Portugal en el Campeonato Latino Senior II (de 45 a 55 años) de la World Dance Sport Federation que se celebra este fin de semana en la ciudad polaca de Elblag.

-¿Qué pasa con los bailarines?

-Es difícil encontrar bailarines y más de una determinada edad y que tenga tu mismo nivel. Yo hace 30 años que imparto clases. Soy profesora, juez nacional y participé en muchas competiciones en España, pero me quedé sin pareja y es difícil encontrar otra. Hay que buscar una que tenga más o menos tu misma edad y que tenga tu mismo nivel. Eso se puede lograr trabajando, pero los años son los años. Yo tengo 52 y los bailarines escasean.

-En Vigo, entonces, ¿no hay?

-Escasea. En Vigo hay poca afición al baile deportivo. Hay más en la provincia de A Coruña. En Narón, por ejemplo, hay cantera. Hay una escuela de baile que está funcionando muy bien.

-¿Por qué cree que lo dejan los chicos?

-Por la edad y porque es un deporte bastante caro. Si quieres desplazarte tienes que salir fuera y el vestuario es súper costoso. Un vestido medio para competir no baja de los 2.500 euros y en maquillaje y peluquería la inversión también es importante. Hay que salir perfecta. Es exigente en presencia en pista.

-¿Cómo se le presentó la oportunidad de «fichar» por Portugal?

-Coincidió que Herlander Tiberio, un compañero portugués que conocía porque éramos competidores de pista, se quedó sin pareja y decidimos empezar a bailar juntos hace dos años. Así pasamos de rivales a aliados.

-Pero también podría ser al revés, que él compitiese por España, ¿no?

-Sí, pero como el año anterior él había quedado campeón nacional por su país, perdía ese rango al venirse a competir a España. Por otra parte valoramos el tema económico. En Galicia hay muy pocos campeonatos y hay que moverse a Madrid, Barcelona o Valencia para acudir a los concursos, lo que supone un gran desembolso, además del que ya tenemos al vernos dos veces por semana para poder entrenar en Oporto o Vigo. Los gastos salen todos de nuestro bolsillo. No tenemos ayudas ni para el campeonato del mundo, que es el más importante porque es oficial y acuden los campeones de cada país.

-Ahora está en la categoría senior, pero habrá pasado por todas.

-Pues sí, aunque empecé tarde. Empecé por la más baja que es la E y ahora estoy en la más alta en España, que es la A.

-¿Y el premio es suculento?

-No, no hay premio monetario. Esto es amor al arte puro y duro. Se hace porque es una forma de reconocimiento de tu trabajo valorado por la federación y te queda en el currículo.

-¿Cuáles son los reyes de la pista?

-El año pasado ganó una pareja española, de Bilbao, aunque los favoritos eran los canadienses.

-Cuando se refiere a baile latino, ¿de qué hablamos exactamente?

-El baile de salón oficial se divide en dos: standard (vals inglés, slow, tango, quickstep y vals vienés) y latino (samba, chachachá, rumba pasodoble y jive), que es en el que yo compito. Hay gente que cree que el baile latino es la salsa y la bachata, pero no.

-Además de bailar, ¿sigue enseñando?

-Sí. Pero el baile latino no está de moda. Teníamos muchos niños pero ahora está en auge la salsa, bachata, zumba... Los chavales se apuntan por la música y lo que les gusta es el hip hop así que se crean muy pocas parejas de baile deportivo, que tiene más normas y mucha técnica. También damos clases a parejas mayores para bailar en fiestas o para novios que preparan su baile de boda.

Por los pelos. Se formó como peluquera y empezó a trabajar con 13 años. Cuando montó su peluquería adaptó el horario para poder bailar y decidió cambiar la tijera por los zapatos de baile a los 20 años.

 Escuela de baile. Montó la escuela Vigobaila hace 18 años.