Científicos del IEO en Vigo han logrado la supervivencia de ejemplares juveniles y han firmado un acuerdo con Nueva Pescanova para que tenga preferencia a optar por la patente
08 nov 2018 . Actualizado a las 20:57 h.Un paso más cerca de poder comer pulpo criado en cautividad. Después de veinte años de investigaciones, personal de los centros oceanográficos de Vigo y Tenerife del Instituto Español de Oceanografía (IEO), han avanzado un poco más en la reproducción de las condiciones de vida de esta especie fuera de su entorno habitual. Esto supone un avance de cara a la explotación comercial de esta especie. De hecho, el IEO ya ha firmado un acuerdo recientemente con Nueva Pescanova por que el la empresa tiene opción preferente a la licencia de la patente sobre esta investigación.
Los investigadores, que ya habían logrado superar las tasas de supervivencia de las larvas, han depurado las técnicas de cultivo y alimentación con metodologías más rentables y replicables. En cuanto al engorde de los ejemplares juveniles, ya se realiza desde hace años con animales capturados en el mar.
El pulpo, con un ciclo corto de vida pero mucho potencial de crecimiento, es en la actualidad un producto muy demandado en los mercados nacionales e internacionales y tiene un gran interés comercial. Por ello se han potenciado los estudios para poder criarlo en la actualidad, tanto de la especie en la que trabaja el IEO, el «octopus vulgaris», como otras similiares.
Los ensayos realiazados en el IEO han mejorado los resultados obtenidos hasta ahora en el cultivo larvario y han logrado llegar a juveniles con los cuales se puede iniciar la fase de engorde hasta llegar a adultos. De hecho, los esfuerzos actuales se centran en la obtención de juveniles y en estudiar su viabilidad económica.
