¿Dónde se vive mejor?

VIGO CIUDAD

MABEL RODRIGUEZ

Las ciudades gallegas juegan en otra liga y la jugamos con deportividad. Pontevedra es un modelo en la ONU. Santiago, el gran imán cultural. ¿Vigo o A Coruña? Los expertos despejan una duda con denominación de origen

25 feb 2019 . Actualizado a las 22:47 h.

Las Rías Baixas son el mejor chaquetón por su clima, y a Vigo nos lleva el sol de la mezcla de culturas y la pujanza industrial. En A Coruña nadie es forastero, tiene su arte modernista, hay moda con clase para todos, y nervio empresarial y cultural. Para riqueza celestial la de Santiago, concentrada en los santos Caminos que llevan a la Catedral. Para tranquilidad, la de Ourense. Pero la única ciudad con premio de la ONU en Galicia por su comodidad y calidad de vida es Pontevedra, un modelo urbano en la era millennial para las familias con niños, donde no arruga la moral ni cuesta envejecer. Es fácil quererla con los pies. Pontevedra, que ha convertido al peatón de 0 a 100 años en rey de la calle, es La città dei bambini, de Tonucci, con su camino escolar.

Las más punteras

Pontevedra se lleva el sobresaliente entre mayores y niños, que van solos al colegio andando gracias a una iniciativa que se curra una comunidad volcada en la ruta escolar, organizada por la Policía Local y en la que participan comerciantes y ciudadanos, según destaca Raquel Martínez Buján, decana de Sociología de la Universidade da Coruña, que se moja aun sabiendo que «es difícil escoger. Yo elegiría un poco de cada lugar. El casco histórico de Santiago, el mar de A Coruña, el clima de Vigo y, quizá, la tranquilidad de Pontevedra», desliza la socióloga para empezar.

En esta Liga urbana hay derbis históricos, emociones fuertes, algunas nubes y nuevo potencial. La pregunta de la mejor ciudad gallega para vivir se responde a la gallega. Bien sabemos que un depende previene el error. «¿La mejor? Depende de qué enfoque le des. Pontevedra y Ourense son ciudades tranquilas, seguras, paseables, en las que tienes todo muy a mano, en las que no hace falta el coche para casi nada. Dan en todo sensación de familiaridad y de confort. Yo, personalmente, me quedo con Ourense. Pero si me preguntas desde el punto de vista de la viabilidad la cosa cambia. La gran ciudad de las oportunidades es Vigo, indiscutiblemente», asegura Benito Iglesias, presidente de la Fegeim (Federación de Empresas Inmobiliarias de Galicia). «Tiene mar, turismo, potencia industrial y una oferta cultural y gastronómica igual que el resto de Galicia, pero con más consistencia», afirma.

Pero a Vigo no hay quien la pasee, ¿no? Es un desafío vertical. «¡No puede tenerlo todo! Vigo no es tranquila, no es cómoda, no es Pontevedra, es compleja, pero para una persona en edad laboral abre un abanico de oportunidades. El naval, el textil y la automoción de Vigo, que tiene una posición estratégica en el mapa de Galicia, están dando grandes alegrías. Es el futuro. Las cosas como son, Vigo es hoy la gran ciudad de las oportunidades. De Santiago, todos tenemos claro cuál es el perfil: una ciudad administrativa, de funcionarios y de turismo; vayas el mes que vayas, y el día de la semana que vayas, en su casco antiguo siempre encuentras gente. Santiago es una ciudad con un turismo de perfil cultural que le da el tirón económico que necesita. Si miras el registro de viviendas vacacionales de la Xunta, comprobarás que la única ciudad de Galicia donde hay más vivienda vacacional en alquiler que normal es Santiago», considera Iglesias, que cita dos nombres propios de la pujanza empresarial de Vigo y A Coruña: Citroën e Inditex.

Si nos vamos a la Universidad antes que al mercado laboral, Vigo lidera el último ránking en volumen de matriculados en estudios superiores especializados, por delante de Santiago y A Coruña, concluye un informe de la Fundación Conocimiento y Desarrollo.

El arte es otro motor... poco ruidoso. Solo dos gallegas brillan en calidad cultural. Y están al Norte. Santiago (puesto 12 de 32) y A Coruña (puesto 15) son las dos únicas ciudades de Galicia que el Observatorio de la Cultura de la Fundación Contemporánea sitúa en el top de la chispa e innovación cultural.

¿Y la presión del estatus? «El mejor lugar para vivir, yo diría que es aquel en el que hay más fluidez social, menos diferencias, más mezcla de clases sociales, de culturas, mayor integración. Yo no conozco en términos generales todo, pero, de lo que conozco, me da la sensación de que en las grandes ciudades los centros están cada vez más polarizados respecto a los barrios, por la revalorización económica de estos terrenos, que también han acarreado la crisis de la construcción, del empleo o la pérdida del comercio local en los barrios. El ocio se está llevando también cada vez más a centros comerciales fuera de la ciudad, y esto está ocurriendo en todas. Pontevedra es el paradigma de ciudad para vivir bien, pero yo, personalmente, me quedo con A Coruña», indica admitiendo su vínculo emocional Raquel Martínez Buján. ¿Pero es Pontevedra una buena ciudad para vivir, un modelo europeo? «Sí, es una ciudad con diversidad, la gente mayor pueden caminar bien, hay una buena ordenación urbana, y los niños son muy valorados», subraya la socióloga, que advierte que «vivir integrado hace que sientas que vives mejor, porque sientes el espacio público más tuyo, y cuando el espacio público es tuyo lo cuidad, lo tratas bien y te sientes a gusto». «Los centros de las ciudades, con sus zonas ajardinadas, a veces están sobrevalorados, generan un 'buenvivir', pero a veces con alquileres de ida y vuelta o inaccesibles para muchas personas. Quienes alcanzan mayores niveles de felicidad son aquellas personas que tienen relaciones más diversas y ricas en su entorno», asegura.

Más allá del orballo estadístico, «es obvio que Santiago es el gran referente internacional, el faro de Galicia para el turismo cultural», asegura Lynda Planchais, vicepresidenta de la Asociación Profesional de Guías de Galicia. 

Para faros milenarios, A Coruña, hercúlea a pie de mar, con el segundo paseo marítimo más largo del mundo (tras el de Lanzarote) y con un conjunto modernista único en Europa. «Vigo y A Coruña atraen a cruceristas de todo el mundo, pero el 90 % de ellos vienen a Santiago, a ver la Catedral. Pero sí te diría que la que el turista ve como ‘la ciudad ideal para vivir’ es A Coruña», apunta Planchais, que observa un aumento del turismo que va (y repite) en el interior de Galicia.

Para vivir al sol que más calienta hai que baixar... Las horas de sol ganan por goleada en las Rías Baixas, y la luz es una vitamina de primera necesidad. 

La gran vía de la población y la empresa está, según el INE, en Vigo (293.642 habitantes frente a los 244.85 de A Coruña, 23.446 empresas frente a 21.154), aunque la suerte per cápita invierte los términos a nivel provincial y el concello con mayor riqueza es Oleiros, y A Coruña, la provincia donde nacen hoy más niños, con Ames, Arteixo y Burela con el pan del futuro bajo el brazo.

¿A cuál le ponemos el 10?