«Hazme la cena, papi, o rompo la casa»

E. V. PITA VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

M.MORALEJO

La Policía Local reduce a una menor de 17 años que destrozó su vivienda porque su padre le hizo esperar por la cena

14 jun 2019 . Actualizado a las 23:04 h.

Un caso de niña tirana en Vigo. Así se llama a adolescentes altamente agresivos que imponen su ley en casa y agreden a sus padres si les desobedecen. En este incidente, la menor, de 17 años, llevaba varios días maltratando a su progenitor, de 39, al que trataba como un criado y al que le exigía que le sirviese la cena con rapidez. El padre quiso ponerla en su sitio y le rogó paciencia, porque aún no había llegado la madre, pero ella reaccionó desproporcionadamente y destrozó la decoración del hogar a golpes y porrazos. Pasó por las habitaciones rompiendo los objetos a su paso. Incluso echó de casa al adulto. La trifulca fue de tal magnitud que la adolescente acabó a bordo de una ambulancia y vigilada en todo momento por un policía. La trasladaron a un hospital para su valoración psiquiátrica.

Todo empezó a las 20.10 horas del jueves en un piso de As Travesas, un barrio cercano a la céntrica plaza de América. En ese momento la madre, de 41 años, no estaba en la vivienda. La hija descansaba en el sofá y le exigió al padre que le hiciese la cena. Él le replicó que debía esperar un poco (aún era pronto para la última comida del día), pero la adolescente montó en cólera y tiró todos los objetos decorativos y mobiliario con el que se cruzó. Luego, se encerró dentro de la vivienda y dejó en la calle al progenitor. Algún testigo alertó a la centralita del 092 del arrebato de la menor y de que el padre se había quedado fuera. Al lugar acudió una patrulla.

Al parecer, la joven llevaba varios días de mal humor. El miércoles había atizado en el ojo a su padre, que todavía conservaba el moratón, y le había causado un corte en la mano.

Los agentes, al llegar, encontraron la puerta abierta. El padre ya estaba otra vez dentro y su hija seguía muy nerviosa y poco colaborativa. Los policías hallaron toda la vivienda revuelta, con numerosos artículos de decoración esparcidos por el suelo, hechos añicos por todas las estancias de la casa.

Los policías interrogaron a la menor para conocer su versión, pero esta seguía en estado agresivo. Cada vez que le hacían una pregunta sobre lo ocurrido, ella se volvía más violenta. Cuando quisieron tranquilizarla, la menor increpó a los funcionarios.

Finalmente, los agentes la redujeron para bajarle la ansiedad. Luego, llamaron a una ambulancia medicalizada y, por recomendación de la doctora que la examinó, la trasladaron en el transporte del 061 escoltada por un policía para garantizar la seguridad del personal sanitario y que la menor no protagonizase nuevos incidentes. Al poco, llegó la madre y se enteró de todo.

La adolescente acabó internada en la unidad psiquiátrica del Hospital Álvaro Cunqueiro para que la evalúen los especialistas. Según dictamine el informe, se adoptarán medidas.

El fenómeno del niño tirano fue analizado hace años por los psicólogos en Vigo. El llamado síndrome de Napoleón describe comportamientos donde el menor no es consciente de su situación real de dependencia y tiene dominados a los padres, a los que doblega con continuas exigencias. La mayoría acaban montando algún incidente y deben pasar por programas de reeducación psicológica.

El mismo día, los agentes realizaron otras intervenciones con menores, pero se trataba de casos de desamparo. En varios de ellos, eran menores que no acudieron a sus escuelas para irse con pandillas de amigos o andaban merodeando por el colegio a pesar de haber sido expulsados.