8.500 operaciones menos en un año amenazan con disparar la lista de espera de Vigo

Ángel Paniagua Pérez
Ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

ALFONSO LUBIAN

La pérdida de cirugías del Chuvi en el confinamiento se acrecentó después

13 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El año del covid, que acaba de terminar, ha dejado unos agujeros en el sistema sanitario que costará mucho tiempo taponar. Uno de los lugares más dañados es el bloque quirúrgico. En todo el año, los quirófanos del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo (Chuvi) operaron a 23.160 personas, mientras que el año anterior habían sido 31.617. Es decir, en un solo año se hicieron casi 8.500 cirugías menos, según los datos a los que ha tenido acceso La Voz. Para este análisis solo se tienen en cuenta las operaciones programadas, porque las urgentes se han mantenido prácticamente igual, en 4.300, una docena cada día.

Esto significa que la actividad en quirófano cayó un 27 %, lo cual representa un enorme problema para un área sanitaria como la de Vigo. Porque el Álvaro Cunqueiro se construyó por dos razones políticas: acabar con los colapsos de las urgencias del viejo Xeral y normalizar la lista de espera quirúrgica. De hecho, el gran objetivo de la Xunta tras su apertura fue situar la lista de espera de las operaciones en el un nivel similar al de Santiago y A Coruña. Y lo empezaba a lograr. En el 2019, Vigo tenía menos lista de espera que A Coruña, en gran parte, porque ese año se hicieron 4.000 operaciones más que el anterior.

Pero luego llegó el covid. No se conoce cuál es el impacto de la epidemia en la lista de espera porque la Xunta no publicó el balance de junio, a pesar de que la ley obliga a hacerlo. Pero menos operaciones significa más lista de espera. Eso sí, con un matiz. El año recién finalizado también redujo las consultas y las pruebas. Fuentes sanitarias explican que eso ha llevado a que se indicasen menos operaciones y que, por lo tanto, haya menos gente en la lista de espera. Esto no significa que la salud de la población sea mejor, sino que hay menos casos incorporados a la estadística oficial. Además, en las listas de espera no aparecen las personas a las que se llama para que se operen en un centro privado y lo rechazan; la Xunta no hace pública esa lista de espera, llamada no estructural.

El confinamiento... y más allá

Los datos dejan claro que no solo fue el confinamiento. No hubo ningún momento del 2020 en el que el Cunqueiro y el Meixoeiro mantuviesen el ritmo del 2019. O en realidad sí: el inicio del año. Hasta la segunda semana de marzo, las cifras eran equiparables. La segunda semana de marzo se operó a una media de 144 personas por día. En la noche del sábado al domingo se decretó el estado de alarma y el confinamiento y la semana siguiente fueron 34 cirugías al día.

La actividad cayó en parte por el miedo de los pacientes, pero sobre todo porque el Sergas desprogramó todo lo que no era urgente o de riesgo vital para que los hospitales tuviesen sitio por si había una avalancha de pacientes de covid.

El Sergas prometió recuperar en verano parte de la actividad perdida, pero el verano concluyó con 1.557 cirugías menos. Y en otoño la segunda ola se disparó, así que tampoco fue posible mantener la actividad. Desde la tercera semana de septiembre hasta que acabó el 2020 se hicieron 2.400 cirugías menos. El problema, ahora, es solucionarlo.