¿Qué nos pone más?

Cláudia Morán

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ELLOS LA VISTA, ELLAS EL OÍDO Mujeres y hombres son diferentes hasta en lo que les excita sexualmente. Si a ellas les vuelve locas un hombre seguro de sí mismo, a ellos les encanta lo que les entra directamente por los ojos... Aunque, como en todo, a veces coinciden.

29 oct 2017 . Actualizado a las 20:29 h.

Dicen que si los hombres son de Marte, las mujeres son de Venus. Y hasta para la atracción sexual -al menos en el caso de las relaciones heterosexuales-, el cliché se repite. Porque si bien para gustos hay colores, no es menos cierto que hay ciertas tendencias típicas del público masculino y del femenino que se detectan a diario en las consultas de sexología, en los foros de Internet y en la vida misma. Los profesionales no dudan: a ellos lo que les atrae sexualmente -o, más coloquialmente, lo que les «pone»- les entra por la vista; a ellas, por el oído. Dicho de otra manera: si los hombres tienden a fijarse más en un buen escote o un buen tacón, las mujeres se excitan con cosas menos materiales, como una voz sensual o una apariencia de seguridad en uno mismo.

«No se puede dar ninguna respuesta contundente porque para gustos hay colores, y para colores, flores», explica la sexóloga Aránzazu García, de la Clínica Vida, en Vigo. Aunque insiste en que se trata de una generalización, observa que «para los hombres, el físico tiene más peso que para las mujeres, a las que les atrae más la parte psicológica, emocional y relacional». Pero añade que lo material y lo sensorial está muchas veces relacionado. «Una misma mujer, el día que se pone tacones y lencería se siente distinta, y sus gestos, actitudes y miradas se vuelven también diferentes», explica.

«A las mujeres, los atributos que desprenden seguridad, fuerza y poder les resultan muy atrayentes», cuenta García. La psicóloga y sexóloga Nayara Malnero secunda esta teoría. «Ellos son mucho más visuales y a nosotras nos gusta que nos regalen el oído, los susurros, el tono de voz, pero también cómo te tocan en una interacción normal; y también la postura corporal: nos gustan los hombres que caminan rectos, porque nos transmite seguridad», señala.

Si nos fijamos en detalles más concretos, hay diferencias hasta en lo que nos excita en el acto sexual. «A ellas les encanta que no haya prisas, con tiempo para los mal llamados prolegómenos, porque hacen que el disfrute sea mayor, mientras que ellos no son de juegos tan largos y les influye mucho cómo ellas se visten, cómo se colocan, la imagen de los genitales o los cambios de postura», dice Malnero.

MÁS ALLÁ DEL FÍSICO

Si en el caso de los hombres los tacones o el maquillaje pueden tener mucho que ver, Aránzazu García advierte que «para eso también hay estilos». «Unos las quieren muy maquilladas y a otros les gustan las ‘antipijas’, por utilizar una palabra», aclara. Por eso, la excitación sexual tiene también para ellos un componente abstracto.

«Si no queremos irnos tanto a escote, tacón y demás, podemos detectar que les atrae una sonrisa que exprese, que implique conexión», añade Nayara Malnero, quien también subraya la percepción de disponibilidad, «si ella está abierta a conocerte o no». «También les atrae la dicotomía mujer explosiva versus mujer niña buena», añade.

Para muestra, un botón: Malnero cuenta con un post en su blog, sexperimentando.es, en el que sus seguidores contestaron qué es lo que más les atrae de alguien que les gusta. En el caso de los hombres, ganaron por goleada los ojos y la mirada, el trasero y los labios, la sonrisa, los pechos, el pelo y la forma de expresarse (por este orden); y, en el de ellas, también por orden, los labios y la sonrisa, los ojos y la mirada, el trasero y la forma de expresarse. Parece que Venus y Marte, aunque lejanos, a veces flotan en la misma órbita. ¿Y a ti qué te pone más?