NO CORRAS TANTO, Que a los 12 no toca ir a clase maquillada ni plancharse el pelo. Un dermatólogo, un oculista y una psicóloga nos cuentan por qué no te corresponde hacerte mayor de lo que eres. Deja lo de disfrazarte para carnaval, que no hay prisa. Y sé valiente para mostrarte tal y como eres.
17 feb 2018 . Actualizado a las 05:20 h.Es llegar a primero de la ESO y revolucionarse las hormonas. Pasas a ser la pequeña del patio, a cruzarte con todos esos chicos y chicas de 15 y 16. Y a sentirte pequeña. Pues déjame decirte que ni eres tan pequeña ni tan mayor como crees. Tienes 12 años y este curso cumples 13, sin más. Y si probablemente ya no llevas las galletas al recreo como en primaria, tampoco es momento aún de pintarte como una puerta para corregir imperfecciones que no tienes para gustarle a nadie.
La psicóloga infantil Alejandra Dotor no es ajena a esta tendencia a adelantarse. «Como padre, si tu hija tiene 12 años puedes poner una norma, porque no se puede maquillar. ¿Que tus amigas lo hacen? Tú no, cariño. No puedes, ni a nivel dermatológico ni a nivel psicológico, porque reflejarás una maduración que no tienes y te van a tratar como si fueses mayor. Te estás sexualizando. Y no puedes jugar a un juego del que aún no conoces las reglas», asegura. Parece obvio, pero entonces, ¿por qué tantas niñas lo hacen tan pronto? «Lo que antes era un fenómeno aislado en unas pocas que desarrollaban antes, ahora se ha generalizado», reconoce la experta, que echa la culpa a dos factores: el acceso instantáneo a la información y la falta de tiempo de los padres.
NO SABEMOS ESPERAR
«Desde bebés se enganchan a la pantalla del móvil o la tablet. Nosotros no crecimos con acceso a todo esto, ni a las redes sociales, donde ven a chicas con esa imagen a las que quieren parecerse. Antes si querías ver el siguiente capítulo de una serie, no te quedaba otra que esperar una semana. Ahora te lo descargas. Es todo ya, con recompensa inmediata, no sabemos frustrarnos ni esperar», dice Dotor, que añade que los padres no tienen tiempo para nada: «¿Qué tiempo les dedicas para inculcarles valores? ¿Por qué estamos siempre diciéndoles ‘qué mayor eres’, como si fuese algo bueno?», se pregunta. Esta es una etapa que hay que experimentar sin máscaras. «Es un momento de cambios que tienes que vivir sin maquillar la realidad y aceptándose a uno mismo, sin querer tapar tus defectos incluso antes de que afloren», afirma. Lo dicho, sé más valiente para aceptarte a ti misma y menos para disfrazarte de alguien que no eres.
1. Depilarse
CON LA PUBERTAD, 12 O 13 AÑOS
El dermatólogo Jesús del Pozo, del centro médico Abaton en A Coruña, nos da las claves. «En condiciones normales y sin patologías de base, lo razonable es empezar a depilarse con la pubertad y no usar nunca la cuchilla, que irrita, hace que salga el pelo con más fuerza y que se enquiste más fácilmente. Es buena idea iniciarse con la crema, que es indolora, y después con la cera, que duele, pero dura más y debilita el vello». El láser ya se lo hace en su clínica a niñas de 10 años para eliminar el vello del labio superior o del entrecejo, pero para el resto del cuerpo no lo recomienda hasta los 16.
2. Maquillarse
DE LOS 16 EN ADELANTE
«Hay muchas niñas de 13 años que van completamente maquilladas y no es bueno. Si a esa edad no tienes acné y te maquillas, lo vas a tener», sentencia Del Pozo, que no cree que un rostro esté apto para maquillarse hasta los 16. «Hacerlo antes es consecuencia de un condicionante social que habría que cambiar», opina el dermatólogo, que avisa del peligro: «Estás obstruyendo totalmente los poros de la piel, por no decir que a saber qué rutinas utilizan para desmaquillarse». Tampoco vale cualquier maquillaje para empezar. «Tienen que ser especiales», añade.
3. Teñirse
DEPENDE DEL TINTE
El tinte es malo, pero no daña tanto como parece. «Reseca un poco el tallo del pelo, pero solo la parte externa, y la fuerza del cabello depende realmente de la raíz. No daña en exceso, son mucho peor otras prácticas», señala Del Pozo, que puntualiza que los tintes «han avanzado muchísimo, evidentemente no son inocuos, pero no tienen nada que ver con lo que eran hace unos años». Lo mejor es esperar un poco, para que el adolescente configure su identidad. No es mala idea probar con los lavables, para probar y evitar males mayores. Si decoloramos, sí dañaremos más el pelo.
4. Ponerse lentillas
A los 13... si estás preparado
Ponerse las lentillas por primera vez no es fácil. El oculista Juan Tábara, de la clínica Coruña Visión, dice que es razonable esperar a los 13 años. Pero no por el desarrollo del ojo: «Tiene que haber una cierta responsabilidad para que sepa utilizarlas y que no vaya a lavarlas con agua ni echarles saliva, por ejemplo», indica. Así que más que de años, aquí toca hablar de madurez. Y una vez que den el paso, hay que enseñarles a ponerlas limitándolas a determinados momentos. «Estaría bien empezar con las desechables de uso diario», apunta el especialista, que advierte de que cuanto antes y más tiempo las pongamos, seguramente antes tengamos que parar de usarlas.
5. Planchas o permanentes
CUANTO MENOS LO HAGAS, MEJOR
Plancharte el pelo, hacerte alisados japoneses o permanentes es lo peor que puedes hacerle a tu melena, así que conviene que la sometas a eso muy pocas veces. «Van destruyendo el tallo y alterando su estructura, maltratan mucho el pelo, bien para aplanarlo o bien para rizarlo», indica el especialista, que advierte de que «un día no pasa nada, pero de forma continuada no se puede hacer. En los adolescentes el pelo es espectacular, luego vamos perdiendo cantidad y grosor. Plancharlo con 12 o 13 años es maltratarlo en su mejor momento».