El embajador de China en España, Lyu Fan, asistió a la celebración de los 150 años de la conservera Albo, propiedad de empresarios chinos
08 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.A los chinos les encantó el sitio, la temperatura, la comida... Todo. Vi cómo se fotografiaban con entusiasmo al lado de los muros y escaleras de piedra del Pazo de Touza. Este rehabilitado enclave ubicado en Nigrán y dedicado a bodas y eventos fue el escenario de un acontecimiento histórico, la celebración del 150 aniversario de Conservas Albo. Una empresa familiar, ahora en manos chinas, cuyo siglo y medio de supervivencia daría para una serie de Netflix. Desde sus inicios en Santoña en 1869, a la posterior factoría de Candás, por ejemplo, hasta llegar a Vigo. Tras el aperitivo en los jardines del pazo con una temperatura de más de 30 grados todo el mundo agradeció entrar en el salón donde hubo que escuchar siete discursos antes de iniciar el almuerzo. Por cierto, muy bueno el servicio y la comida del equipo de Nuria Cervera. Entre el más de centenar de invitados, una importante cantidad de proveedores de la firma y una nutrida representación oriental. Entre ellos Shi Mingfang, presidente de Bright Food, un gigante que, según indicó Alberto Núñez Feijoo en su discurso, factura un poco menos que Inditex. Llamó la atención la vehemencia, o eso lo parece por el idioma, con la que se expresan los chinos. Enrique Albo, que estaba muy nervioso pero hiló un buen discurso cargado de sentimiento, fue el primero en intervenir. Después vendrían los empresarios de ojos rasgados y por último las autoridades locales, Abel Caballero, Javier Losada, delegado del Gobierno en Galicia, y el citado presidente de la Xunta. Como también estaba el embajador de China en España, Lyu Fan, Feijoo aprovechó para invitarle a realizar parte del Camino de Santiago para promocionarlo en su país. «Es un mercado muy interesante porque son 1.450 millones de personas. Eso sí, que vengan de manera escalonada», comentó Feijoo y los invitados rieron la matización. Porque ¿se imaginan lo que sería el Camino con millones de chinos pasando por Pedrafita, por Sarria o por Tui? Casi mejor que no lo den a conocer demasiado por allá.
Parrilla de carne o pescado
En el centro de A Coruña se celebró la primera edición del festival Atlántica Gastronómica. Sus organizadores me llamaron para proponerme ser jurado de uno de los dos concursos de parrilla que incluía el programa. El domingo un certamen de carnes a la brasa y el lunes, de pescados. Por motivos de agenda y de dieta decidí comprometerme a la cita con los peixes. Como finalmente el lunes llovió decidieron suspenderla, así que me quedé sin carne ni pescado. Si en el futuro vienen los 1.450 millones de chinos, los concursos serán de rollitos primavera rellenos de carne o pescado.