Cabo Cañaveral, hasta el infinito y más allá

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JAVIER ARMESTO

De aquí despegó hace 50 años el Apolo 11 rumbo a la Luna, luego lo harían los transbordadores espaciales y ahora los cohetes de Space X. Visitamos el lugar donde empezó el «gran salto para la humanidad»

20 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

En el Museo Nacional del Aire y el Espacio de Washington está el módulo de mando original del Apolo 11 y en el Centro Espacial Houston se conservan las cápsulas Mercury 9 y Gémini 5, pero «el único sitio del que despegaron cohetes fue de Cabo Cañaveral». Así lo recuerdan continuamente en los vídeos y tours guiados del Centro Espacial John F. Kennedy situado en ese saliente de la costa de Florida, a 50 minutos en coche desde Orlando. El gigantesco complejo, que ocupa 570 kilómetros cuadrados y en el que trabajan más de 13.000 personas, es de acceso restringido, pero cuenta con un centro de visitantes que en nada tiene que envidiar a los cercanos parques temáticos de Disney y Universal Studios. Y es que la realidad, como siempre, supera a la ficción.

 La entrada de adultos (más de 12 años) cuesta 57 dólares (50 euros) y la infantil (3-11 años) 47 dólares (41 euros), y da acceso a los distintos museos, tiendas y pabellones que conforman el recinto de acceso al público. Pero también incluye un recorrido explicativo en autobús por buena parte de las instalaciones que permite acercarse a los sitios exactos donde se ha gestado más de medio siglo de exploración espacial.

Fue el 12 de septiembre de 1962 cuando el presidente Kennedy hizo un famoso y emotivo discurso en el que anunció su objetivo de poner un ser humano en el satélite y devolverlo sano y salvo a la Tierra antes de que finalizase la década: «¿Por qué, se preguntarán algunos, elegimos la Luna? Y tal vez también se pregunten: ¿por qué escalar la montaña más alta? ¿Por qué 35 años atrás volamos sobre el Atlántico? [.... Elegimos ir a la Luna en esta década no porque sea fácil, sino porque es difícil. Porque esta meta servirá para organizar y probar lo mejor de nuestras energías y habilidades».

El bus traslada al visitante hasta la mismísima plataforma de lanzamiento 39A desde la que Neil Armstrong y sus compañeros despegaron a bordo del Apolo 11 el 16 de julio de 1969. También pasa junto al icónico edificio de ensamblaje de cohetes (VAB), con el logotipo de la NASA en su fachada, y circula paralelo al doble carril de grava por el que eran trasladados los transbordadores espaciales. Por el camino vemos el hangar de Space X y con suerte podemos descubrir entre la vegetación tropical un Falcon 9 listo para ser enviado al espacio (en nuestro caso contemplamos el que a finales de mayo puso en órbita 60 satélites de la misión Starlink, con la que Elon Musk quiere extender Internet a todo el planeta).

El trayecto, de alrededor de una hora, termina junto a una nave en la que, tras un vídeo explicativo y una secuencia de lanzamiento en el centro de control original, podemos ver el gigantesco Saturno V que impulsó las misiones Apolo. De 110 metros de altura, está puesto en horizontal y separado en sus tres etapas, lo que permite ver los enormes tanques de oxígeno, hidrógeno líquido y queroseno y los impresionantes motores Rocketdyne F-1 necesarios para levantar las 2.900 toneladas de masa que desplazaba el cohete.

De vuelta al recinto principal podemos entrar en diversas exposiciones, como la dedicada a todos los astronautas desde el proyecto Mercury (Glenn, Shepard, Cooper, Grissom, Carpenter..., cuya historia protagoniza la película Elegidos para la gloria); la que aborda los retos presentes -establecimiento de una base permanente en la Luna- y futuros -conquista de Marte- de la NASA; o la que se centra en el programa Space Shuttle. En esta última está una de las piezas más espectaculares, el auténtico transbordador Atlantis, colocado en posición de vuelo. Podemos montar en una atracción que simula un lanzamiento, ver una réplica a escala real del telescopio Hubble y hasta hacernos un selfi con una leyenda: astronautas retirados prestan su último servicio fotografiándose con los turistas.

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1 Cabo Cañaveral.

 Descubierto por el conquistador español Ponce de León, está a 73 kilómetros de Orlando (Florida)

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2 Plataforma 39A.

El lugar exacto desde el que despegaron Armstrong, Aldrin y Collings

3 Saturno V.

El gigantesco cohete. de 110 metros de altura, ocupa un hangar. Cada motor de la primera etapa mide 3,7 metros de diámetro.

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4 Centro de Control.

Está tal cual se utilizó el 16 de julio de 1969 para el lanzamiento del Apolo 11.

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5 Traje de Astronauta.

Perteneció a Eugene Cernan, el último ser humano que pisó la Luna, en 1972.

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6 Rocket Garden

Entre los cohetes exhibidos está el Mercury-Redstone, que puso a Alan Shepard en órbita.

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7 Módolo de Mando

En esta angosta cápsula viajaban los astronautas y regresaban a la Tierra.