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Coordinador de Fisioterapia de Quirónsalud, en A Coruña, nacido en Oviedo en 1979, explica que el confinamiento «ha sido la tormenta perfecta para el dolor de espalda», un problema que va a sufrir una vez en la vida al menos el 85 por ciento de la población. Ramos recomienda consultar ante el primer episodio agudo
25 jun 2020 . Actualizado a las 13:42 h.1 ¿Por qué nos duele tanto la espalda?
Nos encontramos ante un problema epidemiológico de primer orden, que supone la principal causa de incapacidad transitoria en mayores de 45 años. Hasta el 85 % de la población va a sufrir dolor de espalda alguna vez. Solo el 2 % de los casos obedecen a problemas graves, en el 98 % restante el dolor es inespecífico, es decir, hay multitud de factores que se presentan de forma aislada. A día de hoy, el principal problema es la inactividad física.
2 ¿Qué podemos hacer?
La clave es cómo podemos implementar pequeñas medidas que generen grandes cambios. Tan sencillo como subir por las escaleras en vez de en ascensor, alternar períodos de estar sentados y moverse, por ejemplo, colocar la fotocopiadora lejos de nuestra mesa o cada vez que mando un email me estiro un poquito hacia atrás y sigo trabajando... Esto no va a disminuir la productividad, y ayuda.
3 ¿Cuánto tiempo debemos estar sentados como mucho?
El menor tiempo posible, pero no es viable. No debemos estar más de 30 minutos seguidos. No necesariamente hay que levantarse, puede ser cambiar de postura. Lo importante es que hagamos un movimiento antagónico a como estamos normalmente en nuestro puesto de trabajo, que es sentados encorvados hacia delante. Simplemente un movimiento de la espalda hacia atrás, sería fantástico.
4 ¿Qué nos duele más, la parte baja o la alta?
Hasta hace 10 años, el dolor lumbar era el protagonista, pero últimamente el cervical está registrando valores muy similares. Tiene que ver con el mantenimiento de posturas, pero también con que cada vez hacemos más uso de dispositivos móviles, que los estamos utilizando como herramienta de trabajo, y esto supone que la postura no es la que tendríamos en el ordenador con una mesa y silla preparadas. Aun así, el lumbar sigue siendo el que más se ve.
5 ¿Cuándo debemos consultar?
Una vez que aparece el primer episodio, significa que lo vas a volver a sufrir. En la fase inicial es un dolor agudo, y es más fácil de manejar. Si aguantamos, y tenemos varios episodios de dolor agudo puede acabar siendo crónico, y ahí tenemos un verdadero problema. Es importante acudir ante el primer episodio de dolor.
6 ¿Qué es más efectivo: un analgésico, calor...?
Ejercicios de movilidad indoloros, independientemente de que un antiinflamatorio en la fase inicial más aguda puede estar indicado, siempre bajo prescripción médica. Hemos asumido que ante los dolores de espalda hay que recurrir al antiinflamatorio de turno que tengamos y lo que estamos es enmascarando los síntomas que necesitamos conocer para valorar el tratamiento.
7 ¿Qué deporte recomendarías?
Primero habría que hacer una valoración por parte de un fisioterapeuta para optar por una disciplina u otra, pero sobre todo yo diría la que le guste a la persona. Siempre se ha recomendado piscina, y nadie discute los efectos positivos. Ahora bien si no te cuadra cerca o, en el caso de las mujeres, el tema del pelo es un engorro, te va a generar un trastorno y lo vas a acabar dejando. Caminar media hora al día es más accesible, y lo importante es mantenerlo en el tiempo.
8 ¿Nos ha pasado factura el estar sentados 3 meses?
El confinamiento ha disparado el dolor de espalda. Derivado de la disminución drástica de la actividad física, porque aunque hicieras muy poquito igual significaba el cien por cien de tu ejercicio. Además, el teletrabajo ha propiciado que tengamos que utilizar nuestro domicilio como entorno profesional cuando no está lo suficientemente adaptado, hemos incrementado sustancialmente el uso de dispositivos móviles como herramienta de trabajo, y hemos consumido más las plataformas de visionado. El confinamiento ha supuesto la tormenta perfecta para el dolor de espalda.