Estas son las mejores terrazas para disfrutar septiembre

La Voz SUSANA ACOSTA, CATERINA DEVESA, CARLOS CRESPO, PABLO VARELA Y ALEJANDRO G. CHOUCIÑO

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SAVOY 
RESTOBAR
PONTEVEDRA
Desde la terraza del Savoy Restobar tienes las mejores vistas de la plaza de A Ferrería. Aprovecha para reservar mesa al aire libre y degustar su variada y moderna cocina. Te sorprenderá y se convertirá en visita obligada.
SAVOY RESTOBAR PONTEVEDRA Desde la terraza del Savoy Restobar tienes las mejores vistas de la plaza de A Ferrería. Aprovecha para reservar mesa al aire libre y degustar su variada y moderna cocina. Te sorprenderá y se convertirá en visita obligada. RAMON LEIRO

Vuelve la normalidad. Entre comillas. El regreso a la rutina siempre apetece, aunque todavía hay sitios a pie de playa donde despedir el verano. Te presentamos las mejores mesas para estar al aire libre. Coge asiento y disfruta

12 sep 2020 . Actualizado a las 11:59 h.

Sentada en el Savoy Restobar, ves septiembre pasar. Desde esta esquina privilegiada, llena de historia, puedes disfrutar de uno de los lugares más emblemáticos de Pontevedra. La mítica y bella plaza de A Ferrería, el centro social y neurálgico de esta boa vila, que se erige majestuosa para darte la bienvenida a uno de los cascos históricos más bellos y cuidados de Galicia. Desde aquí, bien puedes disfrutar de las vistas, pero también de la creatividad de la cocina de Pablo Liste, un secreto que también tiene a buen recaudo en el Bidiana Tapas, situado también en la encantadora plaza de A Leña.

Hace algo más de tres años que el mítico Café Savoy se convirtió en Restobar. Liste quiso darle un cambio y ofrecer algo más que bebidas a este local de ensueño. «Soy cocinero y no nos dedicamos solo a dar café. Resulta imposible desvincular este local al nombre del Savoy, pero sí quisimos ponerle un nuevo apellido, Restobar, que creemos que es un mensaje claro sobre lo que también se ofrece aquí, una tapería que tiene cocina moderna basada en productos locales y con una base también tradicional», explica Pablo, que aclara incluso que quien lo desea puede reservar mesa en la terraza:«Bien llamando por teléfono o a través de la página web».

Si el tiempo lo permite, como parece que así está siendo en este mes, para Pablo el mejor momento para estar en la terraza del Savoy Restobar es, sin duda, al anochecer. La piedra de esta mítica plaza suelta el calor acumulado del día durante las horas del sol, el cielo comienza a perder los colores azules en favor de los tonos rojizos, poco a poco el bullicio de la tarde da paso a la tranquilidad del final del día, y la iluminación de la plaza le dan una visión más bella si cabe en ese momento del día. Para las noches más frescas o los días lluviosos, este local también tiene un comedor de ensueño en la primera planta, en el que no tendrás que renunciar a las vistas de esta maravillosa plaza.

Pero, por ahora, quedémonos en la terraza. Ya el otoño nos obligará a refugiarnos. Desde este rincón no puedes dejar de probar el ceviche de dorada con espuma de ají (una especie de chile) de Padrón. Es, sin duda, uno de los platos estrella de este local, aunque Pablo no deja de crear y reconoce que tiene una carta muy dinámica, que varía muy a menudo. Tampoco puedes dejar de pedir el raxo de presa de cerdo de bellota, que lo presenta con patatas crujientes y pimientos estofados: «Lo que queremos es que vengan por nuestra cocina, no por un plato concreto solo o una especialidad... Pero sí, esos dos platos en concreto tienen muchísimo éxito».

Fuera del horario de las comidas, la terraza también es ideal para degustar un helado y un refresco. Y, ¡por qué no! una buena partida de cartas. Cualquier momento es bueno para estar en esta esquina.

BALARÉS. Ponteceso. Ana Sousa hace buen balance del verano, a pesar de las circunstancias. Tanto es así, que incluso el chiringuito de Balarés prolongará la apertura durante este mes: «A xente busca espazos ao aire libre e aínda se pode aproveitar a terraza», asegura  su dueña.
BALARÉS. Ponteceso. Ana Sousa hace buen balance del verano, a pesar de las circunstancias. Tanto es así, que incluso el chiringuito de Balarés prolongará la apertura durante este mes: «A xente busca espazos ao aire libre e aínda se pode aproveitar a terraza», asegura su dueña. Ana Garcia

TAMBIÉN DE CHIRINGUITO

Septiembre continúa siendo un buen mes en el Chiringuito de Balarés, en Ponteceso, que cuenta con una amplia terraza y una zona protegida del viento. «Temos unha zona abrigadiña, polo que se hai sol, pero sopra un pouco de aire a xente pode estar tranquilamente», explica la responsable del local, Ana Sousa. Para ella, la primera quincena de este mes continúa siendo igual de fuerte que el mes de agosto. «Hai moita xente que colle agora as vacacións e que sempre ven. Temos clientes habituais de todos os anos, tamén doutras zonas, sobre todo, de Madrid».

Desde que abrió a mediados de mayo, cuando se permitió la apertura de las terrazas, Ana no ha parado de trabajar. «Tivemos moita xente todos os días, sobre todo os fins de semana». Debido a los condiciones del local, este año ha decidido prolongar unos días más la actividad. «Normalmente pechamos o dez de setembro ou así, pero este mes imos continuar máis tempo xa que a xente busca espazos ao aire libre e aínda se pode aproveitar a terraza bastante», indica.

Los habituales ya conocen los encantos del entorno de este chiringuito, situado en una zona natural privilegiada como es la playa de Balarés, pero para los que nunca han ido se encontrarán con unas vistas de escándalo. Para evitar aglomeraciones y respetar todas las medidas de seguridad ante el coronavirus, la encargada aplicó cambios, como la reducción de raciones para compartir y la instalación de una máquina para asar pollos. «Puxémola porque moita xente vén buscar tamén a comida para levar á praia». Nada mejor que disfrutar de una jornada en el arenal y finalizar el día en esta terraza. «Sempre tiven claro que quería que a xente trouxose a praia para a terraza. De aí o nome de chiringuito en vez de restaurante», indica Ana.

Sousa, que lleva ya tres años al frente del negocio con un balance muy positivo. «Por sorte sempre tivemos moitos clientes, este ano tamén, así que estou moi contenta».

MONTI AMBIGÚ. A Coruña. La plaza del Papagayo esconde una terraza casi secreta donde el sol se siente como en casa al estar resguardada del viento. Olvídate también del ruido de los coches al sentarte en esta terraza del centro de A Coruña.
MONTI AMBIGÚ. A Coruña. La plaza del Papagayo esconde una terraza casi secreta donde el sol se siente como en casa al estar resguardada del viento. Olvídate también del ruido de los coches al sentarte en esta terraza del centro de A Coruña. MARCOS MÍGUEZ

LA PLAZA DEL «SOL»

¿Viento del noroeste? En la plaza del Papagayo no saben lo que es sentir las rachas de aire de la ciudad herculina. «Estamos tan recogidos que aquí no vienes si no te traen», señala Ramón Souto, propietario del bar Monty Ambigú. Su renombre ha hecho que este rectángulo «oculto» para muchos sea el punto de encuentro para otros. «Ya conozco la terraza del Monty desde hace años. De hecho, es una de las que voy siempre cuando vengo a A Coruña», resalta Ángeles Conchado, de Oleiros. Ambos comentan que, pese a estar oculta entre edificios, el sol da en las parte central del día. «Comienza a calentar sobre la una y aguanta hasta las siete de la tarde», matiza Sánchez. El local tiene un total de 18 mesas en las que rige la calma y la paz: «No hay ruidos de coche ni nada, pero al mismo tiempo estás en el centro de la ciudad», añade Sánchez. Un factor que encandiló a Ezio Salvatore, venezolano que lleva dos años en la urbe: «Me parece un lugar muy agradable, tranquilo y con muy buen servicio». Concluyen que hasta es ideal para una primera cita. «Suelo venir con amistades o si en algún momento quedo con alguien pues es un sitio que me gusta», destaca Conchado.

VELVET. Cambados. En el corazón del casco histórico, en la coqueta y recogida plaza de A Leña, el Velvet propone una abrumadora oferta de coctelería que sobrepasa con mucho lo convencional. Una exquisita presentación en un cuidado ambiente agrandan la tentación.
VELVET. Cambados. En el corazón del casco histórico, en la coqueta y recogida plaza de A Leña, el Velvet propone una abrumadora oferta de coctelería que sobrepasa con mucho lo convencional. Una exquisita presentación en un cuidado ambiente agrandan la tentación. MARTINA MISER

EN CAMBADOS

Apenas a 200 metros de la monumental plaza de Fefiñáns, en Cambados, se halla otra mucho más recogida y discreta, la de A Leña. Liberado del tráfico, este coqueto rincón se ha convertido en referencial punto de encuentro. La coctelería Velvet supone el complemento perfecto. María y su hijo Luis lo tuvieron claro cuando en el 2015 abrieron las puertas del local. «Teníamos que proponer algo diferente a lo que ya había», comentan. Y a fe que lo han conseguido. Pocos locales pueden presumir en Galicia de una oferta semejante de cócteles, batidos, combinados y licores. Y si a su moderno y confortable espacio interior, le añadimos su acogedora terraza, protegida de los cuatro vientos en el corazón del casco histórico cambadés, y un esmerado servicio, exquisito en los detalles, concluiremos que estamos efectivamente ante ese lugar singular que sus propietarios ansiaban.

La carta de cócteles no puede resultar más sugerente. Además de los habituales, nos encontramos otros muchos menos frecuentes como el Blueberry Ginger Tiki, (arándanos, jengibre, piña, lima y ron), o el Pisco Sour (zumo de limón, jarabe de azúcar, albúmina y pisco). Y creaciones propias como el Don Papa Velvet (lima, hierbabuena, reducción de vino con canela y ron prémium) o el Velvet Pasión (Cointreau, zumo de limón, fruta de la pasión y ginebra). La propuesta del Velvet se completa con una oferta de batidos (algunos tan originales como el de crema de orujo con Oreo o con Ferrero Rocher), smoothies, frappés y granizados de frutas elaborados al momento. No le desmerece la selección de ginebras, de wikis y medio centenar de marcas de cervezas de importación y artesanas gallegas.

TAMARINDO. Ourense. En pleno centro, es una parada casi obligada para aprovechar el ir y venir de la Praza Maior. El buen ambiente, el sol y las restricciones que han tomado ahora por el covid, dan buena cuenta de que es un establecimiento seguro para pasar un buen rato.
TAMARINDO. Ourense. En pleno centro, es una parada casi obligada para aprovechar el ir y venir de la Praza Maior. El buen ambiente, el sol y las restricciones que han tomado ahora por el covid, dan buena cuenta de que es un establecimiento seguro para pasar un buen rato. Santi M. Amil

RELAX EN OURENSE

En la ciudad de Ourense, quien busca tranquilidad en las terrazas y un entorno privilegiado dentro del casco antiguo acude al Tamarindo, un bar con vistas a la Praza Maior. No es casualidad, porque la zona de tapas y vinos está a poco más de un par de minutos andando y el recinto termal urbano de As Burgas a apenas 200 metros. Así que, el local es casi una parada obligada en todas las estaciones del año.

Aida Martínez y Diego Villar, dos jóvenes vigueses de paso por la provincia, aprovecharon el sol de septiembre para tomarse un respiro en la terraza del Tamarindo tras una larga mañana de tiendas. «Vamos a casarnos en breve», decían sonriendo. Llegaron con la idea de buscar alianzas en las joyerías de la ciudad, «y nos vinimos un rato a la terraza del bar para hacer tiempo, porque nos llamó la atención el buen ambiente que había y también para estar un rato al sol».

En el Tamarindo trabajan actualmente con nueve mesas tras las restricciones por el covid-19, que marca el regreso a un aforo del 50 % en base al espacio disponible. Brais Domínguez, uno de los camareros, lleva cuatro de sus 27 años trabajando en el local, y explica por qué el establecimiento es uno de los que mejor funciona en la ciudad a la hora de atraer turistas: «Somos muy estrictos con lo referente a cumplir las normas sanitarias, y la gente lo nota cuando se deja caer por aquí. Pero además, es un bar en el que es fácil estar relajado».