Juan Romero, sexólogo: «Los chicos y chicas hacen intercambios sexuales en corro»

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CAPOTILLO

Los jóvenes gallegos se inician en la cópula a los 15 años, y aunque tienen mucha información, también la tienen muy mala. «La pornografía está a golpe de clic», apunta el experto

08 may 2022 . Actualizado a las 08:43 h.

«La mayoría de los padres y de las madres aún se sorprenden de que sus hijos tengan actividad sexual a los 15 o 16 años», señala Juan Romero, psicólogo y sexólogo del gabinete Edicc de Pontevedra. «Todavía hay quienes creen que no hacen ese tipo de cosas, pero claro que lo están haciendo», dice el experto, que está acostumbrado a tratar a adolescentes. La sobreinformación, pero sobre todo la mala información, puede acabar dañando su autoestima y llevarlos a hacer prácticas que no quieren. «El grupo les tira», apunta el sexólogo, que da las claves de cómo actuar cuando no están a gusto.  

—¿A qué años tienen los gallegos su primera actividad sexual?

—Si hablamos de besos o caricias, suelen tenerla a los 11 o 12 años. A esa edad empiezan a tocarse. Si nos referimos a la cópula, a la penetración, está en los 14 o 15 años.

—¿Los jóvenes están muy perdidos?

—Hay un poquito de todo. Yo trabajo en el contexto de la Cruz Roja, con adolescentes, y a veces tienen mucha información, pero también muy mala información. La comunicación con los padres es fundamental, les influye mucho. Pero hay algunos chicos que están perdidos porque el grupo les tira a hacer cosas que no desean, actividades sexuales en grupo.

 —¿Hay muchas actividades en grupo?

—Sí, hacen corros de chicos y chicas y van compartiendo parejas. Hacen intercambios sexuales, tocamientos, tienen erecciones, se provocan excitación, practican sexo unos con otros... Ellos juegan a ver cuánto aguantan la erección.

Muchos y muchas no estarán cómodos...

—Claro. Por eso es tan importante la educación, hay que explicarles que eso no es lo normal, que no deben estar obligados a hacer nada que no quieran. Y avanzarles que son prácticas de riesgo.

—¿Qué deben hacer los padres?

—Si los padres hablan entre ellos y tienen buena comunicación también la tendrán con los hijos. Hoy los chicos tienen a golpe de clic toda la pornografía en el móvil. Y se están exponiendo a roles sexuales que pueden creer normales, pero que no lo son. Es en esto en lo que hay que compartir tiempo con los hijos, en explicarles que esa no es una relación de pareja.

¿Por qué suelen acudir a tu consulta?

—Cuando son jóvenes les suele preocupar la eyaculación precoz, y cuando son mayores, la erección. La mujeres vienen más con dolor vaginal, en parte debido a la penetración rápida y por falta de deseo. Muchas no consiguen el orgasmo y les preocupa. Las chicas vienen por problemas de imagen: el tamaño de los pechos, la cadera..., porque se ven gordas o muy delgadas y se sienten apartadas de los referentes. Eso les genera un conflicto sexual. El hecho de desnudarse les supone un problema. No se gustan y se esconden en los preeliminares, eso las lleva a hacer la actividad sexual muy rápido y les genera un problema de autoestima.

¿Programar el sexo cuatro veces por semana como Jennifer Lopez es matar el deseo?

—¡Claro! Es mucho más, lo abocas al fracaso. Hacerlo cuatro veces a la semana es una forma de condena.

—¿Hay gente que lo planifica: todos los lunes, todos los viernes...?

—No es bueno planificar, pero sí es bueno, dependiendo de las circunstancias de cada pareja, poner en práctica ciertas actividades cuando hay un problema, se planifican unos encuentros para aumentar el deseo, compra de objetos…, que haya unos prolegómenos.

—¿Se busca una intimidad?

—Sí, sí. Compartir un tiempo de pareja, sobre todo cuando hay un estrés, mucho trabajo, ocupaciones..., a veces las parejas no tienen tiempo. Esa planificación del tiempo sí puede prograrmarseí, pero no una frecuencia de relaciones, eso ya genera estrés.

—¿Decae el deseo con la edad? O hay deseo siempre?

ùHay un factor estacional importante, y la sexualidad tiene un componente hormonal, social y psicoafectivo. Hay determinados momentos, como en la menopausia, que es un período clave en el deseo para las mujere, en que influye. Algunas se encuentran totalmente libres, no se sienten presionadas por el embarazo, y les aumenta su deseo sexual. Otras, en cambio, bajan su actitud sexual. Y a los hombres también les pasa, sobre todo cuando llegan los problemas de erección, pero todo depende de la educación sexual, si centran la actividad en la erección les influye.

¿Cuántas veces por semana lo hacen las parejas?

—Cada pareja es un mundo y no se pueden normalizar las relaciones. Varía según épocas y circunstancias, durante un tiempo puede ser normal dos o tres veces, o una o dos, o ninguna. Cada pareja sabe lo que es normal.

 —Algunos no podrán verse físicamente.

—Los que no se ven, por la distancia, tienen sexo vía internet, que también es una forma. Desde la pandemia ha aumentado mucho, sobre todo en gente joven, que exploran la actividad sexual así: se masturban, se desnudan...

 —Fuera del coito, ¿qué prácticas sexuales suelen gustar más?

—Antes del coito está el sexo oral y las caricias: la estimulación oral o manual del clítoris y del pene.

 —¿El mayor beneficio de practicar sexo?

—La autoestima va a subir, y si es en pareja, se van a reducir los conflictos. En general, el bienestar va a ser mayor: para uno mismo, para la pareja y para la familia. El cuerpo elimina toxinas, y es una manera de cuidarse, relajarse y aceptarse. Es un equilibrio.