Wolfgang Weiss, presidente del Comité Científico de la ONU, indicó que se encuentra por debajo del desastre de Chernóbil pero por encima del de la planta de Three Mile Island, en la que se produjo un importante escape radioactivo.
La grieta, descubierta el pasado sábado, fue sellada gracias a la inyección en el subsuelo de la central, cerca del reactor 2, de silicato de sodio, un polímero soluble que al endurecerse bloqueó la salida de agua contaminada.