La china Chery confirma que ensamblará coches eléctricos en la antigua Nissan en Barcelona

m.sio dopeso REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

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Incorporará a los 600 trabajadores que quedaron en el limbo laboral tras el cierre del grupo japonés en el 2021

17 abr 2024 . Actualizado a las 08:23 h.

Ya es oficial. El fabricante de coches chino Chery confirmó ayer en un comunicado conjunto con EV Motors que ensamblará sus vehículos en la antigua fábrica que Nissan dejó vacía a finales del 2021 en la Zona Franca de Barcelona. El acuerdo rubricado ayer convierte al grupo asiático en la primera empresa china del sector del automóvil que abrirá una factoría en Europa —adelantándose a BYD, que se instalará en Hungría—, con la intención de hacer de Barcelona su puerta de entrada al mercado europeo de la electromovilidad.

«El acuerdo hará realidad la reindustrialización de la planta de Zona Franca de Barcelona, propiedad de EV Motors, con la fabricación del primer modelo de la marca Ebro en el cuarto trimestre de este año, después del inicio productivo con vehículos de Omoda», anunció Chery.

El desembarco en la capital catalana, en un terreno privilegiado como es el polígono de la Zona Franca, muy cerca del puerto y bien conectado, es estratégico para que los componentes enviados desde China lleguen rápidamente a la fábrica. Y es que, según han aclarado fuentes de la operación, inicialmente el proyecto de Chery no será fabricar coches, sino ensamblarlos. Un modelo similar al de los muebles de Ikea: las piezas llegan de China a medio montar y en Barcelona los operarios se encargan de acabar de componer el puzle, para luego mandarlo a los concesionarios.

El porcentaje de faena que irán asumiendo los operarios barceloneses en la producción de los futuros vehículos de Chery irá a más. Según explican fuentes conocedoras, la idea es que a partir de la primavera del 2025 la carga de trabajo subiría y la parte de ensamblaje que se haría en Barcelona sería mayor. El objetivo en el horizonte es empezar a fabricar íntegramente parte de sus vehículos en la Zona Franca catalana a partir de finales del 2026 o principios del 2027, una vez que la asociación Chery-EV Motors haya consolidado una red estable de proveedores locales.

Hay que tener en cuenta que Chery es el grupo automovilístico chino que más coches exporta al resto del mundo. Solo en enero del 2024 puso fuera de su país 960.000 vehículos, muy por encima de los 600.000 coches exportados por SAIC, segundo grupo que más automóviles llevó fuera de sus fronteras.

Ante la amenaza de la UE de imponer aranceles, las compañías chinas se han lanzado a la carrera para encontrar ubicaciones para sus plantas europeas y están eligiendo grandes puertos, como Chery en Barcelona, para sus desembarcos.

Pero los planes del fabricante asiático son aún más ambiciosos. El presidente de Chery, Yin Tongyue, que hoy será recibido por el ministro español de Industria, Jordi Hereu, acaba de anunciar en su país que existe interés, y mucho, por esta nueva plataforma para coches eléctricos que abrirá en Europa. «Dos marcas europeas quieren utilizar nuestra plataforma y se firmará un acuerdo con una de ellas», aseguró Yin Tongyue, en declaraciones recogidas por Reuters, durante la presentación del Exlantis ET, el nuevo todocamino eléctrico de su marca Exeed.

Alianza con Jaguar Land Rover

La marca con la que Chery mantiene las conversaciones más avanzadas sería Jaguar-Land Rover (JLR), según la información que llega desde medios chinos, basándose en que el presidente del grupo destacó que las marcas interesadas en su plataforma tenían un corte prémium, y JLR encajaría «a la perfección» en la descripción. Este acuerdo, que podría firmarse esta misma semana, permitiría a Jaguar-Land Rover empezar a producir vehículos eléctricos sobre esta plataforma ya a partir de la segunda mitad de este año. Pero hay más: el presidente de Chery también aseguró que está en conversaciones con otras dos marcas europeas sobre posibles asociaciones.

Los 600 trabajadores de Nissan que se habían quedado en un limbo laboral ven ahora su futuro despejado. En el momento de la marcha del fabricante japonés, Generalitat, Consorcio de la Zona Franca, Nissan y los sindicatos acordaron que las instalaciones serían reindustrializadas y los trabajadores tendrían un contrato de formación para adaptarse a la nueva tecnología.