Valverde y Costa Verde: dos referentes hosteleros del litoral de Ferrol a la espera de nueva vida

B. ANTÓN FERROL / LA VOZ

FERROL

El Costa Verde, en San Jorge, cerró en octubre y se encuentra disponible para la venta o el alquiler
El Costa Verde, en San Jorge, cerró en octubre y se encuentra disponible para la venta o el alquiler CESAR TOIMIL

Los dos restaurantes bajaron la persiana a finales del 2023 y buscan relevo. El Boa Onda de Penencia también está cerrado, pero de forma temporal: en marzo reabrirá sus puertas

08 feb 2024 . Actualizado a las 14:22 h.

El pasado fin de semana, con un sol reluciente en un cielo despejado de nubes y unas temperaturas más propias de la primavera que del invierno, fueron muchos los que se lanzaron a buscar mesa en alguno de los restaurantes situados en primera línea de la costa ferrolana. Algunos ya lo sabían y los descartaron, pero hubo quienes se llevaron una sorpresa al comprobar que tres de esos referentes culinarios situados a pie de playa se encuentran cerrados: el Boa Onda, el Valverde y el Costa Verde.

Los fans del primero de ellos no deben preocuparse, ya que, según han informado sus responsables, se trata de un cierre temporal y el Boa Onda —que abrió sus puertas en el 2018 en el local del mítico Lume Boo— volverá a subir la persiana frente a la playa de Penencia el próximo mes de marzo. Más incierto es, en cambio, el futuro del Valverde de Doniños y el Costa Verde de San Jorge, dos establecimientos situados a un tiro de piedra de esas dos playas, en un entorno privilegiado, pero que, de momento, todavía no han encontrado relevo ni tienen fecha de reapertura.

El antiguo Lume Boo de Penencia reabrió como Boa Onda en el año 2018. Estuvo cerrado unos meses, y se reactivó el pasado día 15
El antiguo Lume Boo de Penencia reabrió como Boa Onda en el año 2018. Estuvo cerrado unos meses, y se reactivó el pasado día 15 CESAR TOIMIL

El Costa Verde se inauguró en el año 1957 de la mano de Feliciano López Bogo, que construyó el edificio para abrir un restaurante que contaba con dos comedores y chimenea de piedra. El establecimiento funcionó con éxito durante muchos años, pero, tras su cierre, permaneció inactivo una larga temporada hasta que dos emprendedores lo reabrieron en el 2011 con el nombre de Arena Beach Club, un café-restaurante que funcionaba también como «surfcamp». De aquellas manos pasó más tarde a las de Tere Castro, quien recuperó el nombre original y durante una década se ganó una clientela fiel gracias a su buen hacer, simpatía y cocina casera. Y el pasado otoño quedó inactivo de nuevo debido al retiro de la hostelera, quien en octubre puso punto y final a su etapa en el Costa Verde.

Para venta o alquiler

Desde entonces, este local de la playa de San Jorge se encuentra encuentra disponible para la venta o el alquiler en la inmobiliaria AM, según explica Amalia López, hija del fundador y propietaria de las instalaciones junto a su hermana. «El local es una maravilla, conserva la chimenea original de piedra y cuenta con dos terrazas muy espaciosas, una en la parte delantera y otra en la trasera. Además, está al lado de la playa y tiene aparcamiento propio», explica la dueña del Costa Verde, al tiempo que apunta que el edificio dispone de nueve habitaciones en la planta superior.

El Valverde de Doniños recuperó su nombre original en el 2018, tras la jubilación de Alejandro Rodríguez, que en ese mismo local comandó el bar Cholas durante 12 años
El Valverde de Doniños recuperó su nombre original en el 2018, tras la jubilación de Alejandro Rodríguez, que en ese mismo local comandó el bar Cholas durante 12 años CESAR TOIMIL

También a la espera de alguien que le dé nueva vida está el Valverde de Doniños, que cerró a finales del 2023 después de que el último hostelero que lo explotaba abandonase la actividad. Los propietarios, Teresa Muñiz y Ramón Rodríguez, tienen previsto ponerlo en alquiler próximamente —una vez hayan acometido unos arreglos— y confían en que pronto vuelva a subir la persiana, ya que ya han recibido varias ofertas para reactivarlo.

Hace años, el local albergó la asociación vecinal O Lago, donde el matrimonio regentaba un establecimiento hostelero que más tarde bautizó como Valverde. Después funcionó como Casa Cholas durante 12 años, de la mano del hostelero Alejandro Rodríguez. Y tras su jubilación, el restaurante recuperó su nombre original.

Ahora, recién cerrado, el local aguarda a que algún emprendedor vuelva a encender sus fogones para que ferrolanos y visitantes disfruten de nuevo de su cocina y de sus impresionantes vistas y puestas de sol sobre la playa de Doniños.