El asesino de Morata de Tajuña, trasladado a la cárcel de Teixeiro tras matar a su compañero de celda

Redacción LA VOZ

GALICIA

El asesino confeso de los tres hermanos de Morata, Dilawar Hussain
El asesino confeso de los tres hermanos de Morata, Dilawar Hussain Colpisa

El asesino de los tres hermanos de Morata, que hace unos días mató a su compañero de celda, ha sido trasladado a la prisión coruñesa. Continuará en régimen de aislamiento, con vigilancia especial y salidas al patio limitadas a él solo

22 feb 2024 . Actualizado a las 17:56 h.

El hombre de origen pakistaní encarcelado provisionalmente en la cárcel de Estremera tras confesar el asesinato en Navidad de tres hermanos en Morata de Tajuña, y que hace unos días mató presuntamente a su compañero de celda, fue trasladado en la noche de este miércoles a la prisión de Valdemoro y de allí a la de Teixeiro, en A Coruña. 

Dilawar Hussain F. C. pasó la noche de este miércoles en Madrid III Valdemoro, a la espera de un nuevo destino carcelario. Este jueves fue trasladado a la prisión de Teixeiro, donde continuará en el mismo régimen de aislamiento en una celda en solitario, con vigilancia especial y con salidas al patio limitadas y él solo. Allí será sometido a un examen médico para evaluar su estado psicológico y descartar así cualquier tipo de enajenación mental. Al ingresar en la cárcel se le practicó un reconocimiento médico y psicológico, sin que se le detectasen enfermedades. 

Este tipo de movimientos son habituales en casos como el de Dilawer Hussain F. C., que habría matado a golpes a su compañero de celda con una pesa que el fallecido habría robado del gimnasio de la cárcel días antes. Un artículo que no está permitido en el interior de las celdas. Tras matar a su cuarta víctima, el hombre se habría duchado y tapado el cadáver con una manta. Después, llamó a los funcionarios para confesar lo ocurrido. 

La mancuerna, de dos kilos y medio, fue localizada tras el crimen, que ocurrió sobre las dos de la madrugada. El presunto asesino no llevaba demasiado tiempo compartiendo celda con el fallecido, Ángel A. V., un ciudadano búlgaro de 40 años y de gran corpulencia que acumulaba numerosos antecedentes por violencia de género, agresión sexual, lesiones y robos. 

El pakistaní confesó a los agentes que lo había matado por problemas de olores y de convivencia en la celda, además de por una pelea previa esa noche, aunque los funcionarios de prisiones no reportaron incidentes ni broncas ese día ni anteriores entre ambos. En ese caso, se les habría separado. Fuentes penitenciarias consultadas por Europa Press afirman que jugaban frecuentemente al ajedrez. 

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Desde que entró en la cárcel el 24 de enero hasta el 15 de febrero, cuando asesinó a su compañero de celda, ambos convivían en el módulo 12 de Estremera, el que acoge a los presos más conflictivos. Ángel A. V. se encontraba en prisión provisional por haber maltratado a su pareja. Ya había pasado por las cárceles de Torrecica (Albacete) y la de Ocaña (Toledo), y contaba con varios informes negativos por mal comportamiento.