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Los políticos no aprovechan Twitch: todas las ventajas de tener presencia en la red de streaming

Tamara Montero
Tamara Montero SANTIAGO / LA VOZ

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Los partidos españoles apenas utilizan esta red, donde se concentran las audiencias más jóvenes: un 42 % son personas de entre 18 y 24 años

12 abr 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

La política ha cambiado, y mucho. De presentar programas electorales a debates entre candidatos se ha pasado a la presencia absoluta en internet y las redes sociales. Si hace décadas la telegenia se convirtió en una de las características básicas de un candidato político, que no podía pensar en alcanzar buenos resultados sin dar bien en cámara, hoy en día es la capacidad de adaptarse a los códigos de las redes para poder transmitir su mensaje. Y no siempre lo consiguen. 

Al menos no en redes en las que se reúne la audiencia más joven, también la más abstencionista, la que mayor desafección política presenta y la que potencialmente y siendo movilizada podría contribuir a dar vuelcos a los procesos electorales. Una investigación de la Universitat Internacional de Catalunya (UIC) y la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) ha concluido que Twitch, la plataforma de streaming, es una de las herramientas más desaprovechadas por los partidos políticos para conectar con los votantes más jóvenes. 

«De manera orientativa, la cifra de audiencia de Twitch es un 42 % de gente de 18 a 24 años», explica Núria Roca-Trenchs, una de las investigadoras de este proyecto. Los políticos pertenecen a una franja de edad mucho más alta, por lo que «pueden intentar entrar, pero si no entienden el lenguaje que se usa en Twitch no van a saberlo aprovechar».

Y no lo están haciendo. La investigación de ambas universidades revela que solo dos partidos tenían un perfil en esta red de streaming: VOX, con presencia desde el 2021, y el PSOE, que cerró la cuenta en el proceso de investigación. «Se hace un uso irregular de la plataforma», explica el estudio. 

Y eso que tiene un enorme potencial de conexión, y de manera bastante estrecha, con potenciales simpatizantes y votantes, porque no es necesario atraer a esas audiencias jóvenes a mítines por ejemplo, sino que el público objetivo ya está dentro de la plataforma. «Pero si queremos que los jóvenes vuelvan a tener interés hacia la política, los políticos tienen que hablar de sus intereses de las cosas que les preocupan». Es decir, manejar con soltura los códigos y el lenguaje de la plataforma en cuestión y abordar problemáticas que generan preocupación entre las franjas de edad más bajas. 

Igual que en el resto de las redes sociales, es fundamental tener un plan de contenidos y de redes bien definido antes de lanzarse al mundo del streaming en una red como Twitch. «No se puede improvisar, porque esto puede afectar a la propia reputación de los políticos», explica Roca-Trenchs. 

Una de las ventajas potenciales de Twitch es su mayor capacidad para interactuar con los usuarios que otras redes sociales. Si otra plataforma centrada en el vídeo como es Youtube el contenido se ve fundamentalmente en diferido, en Twitch se produce en directo, lo que permite una conexión más directa con la audiencia, «puedes hablar en directo con un político o con un congresista aunque sea a distancia». Núria Roca-Trenchs pone como ejemplo a Alexandria Ocasio-Cortez, congresista demócrata de los Estados Unidos, que ha utilizado la plataforma adaptándose a su código: mientras jugaba a videojuegos, iba contestando las preguntas que las personas que se habían conectado a su streaming le iban haciendo. 

Ocasio-Cortez ha sabido aprovechar las principales ventajas que ofrece Twitch: la cercanía del directo, porque al final es como tomar un café con los votantes, y el hecho de crear comunidad, ya que los jóvenes se acercan a esta plataforma porque «se sienten integrados. Son personas jóvenes que están conformando su identidad y quieren sentirse escuchados».

De hecho, Twitch es la primera plataforma de streaming en España, con una cuota del 56 %, por delante de YouTube Gaming, Facebook Gaming o SteamTV, por poner algunos ejemplos. El sitio registra, según los datos publicados por Statista y correspondientes al 2023, 88 minutos de uso diario en España.

Existen más ejemplos de presencia política en Twitch, como la primera ministra de Nueva Zelanda o incluso, en España, Íñigo Errejón, pero los partidos políticos no acaban de posicionarse claramente en la red de streaming. «No hay una estrategia muy clara», dice la investigadora sobre el uso que las diferentes formaciones dan (o no dan aún) a Twitch. 

Y eso con un año de especial actividad electoral en España, con citas autonómicas y unas elecciones europeas que se están centrando en la franja más joven para invitarla a participar. En cuanto al uso de Twitch, Núria Roca-Trenchs afirma que «aún queda mucho camino para recorrer» en el aprovechamiento para la comunicación política, que es todavía terreno prácticamente inexplorado.

Quienes sí comienzan a explorarlo son por ejemplo profesionales de la comunicación y creadores de contenido que en sus canales de Twitch invitan a personalidades políticas para participar en los streaming. El hecho de que la primera entrevista de Leo Messi tras su presentación como jugador del PSG es un buen ejemplo de la capacidad como medio de comunicación de tiene esta plataforma de streaming y es un terreno que valdría la pena explorar por parte de la comunicación política, explica la investigadora del grupo GAME. 

Uno de los retos que habría que abordar es el poder convertir la plataforma en «una herramienta para la juventud poco politizada y la juventud que lo está básicamente en dos ejes, la emergencia climática y el género, tanto a favor como en contra» y reducir los índices de desafección que hay en estas franjas de edad con los asuntos públicos. 

Es más, avanzar en el uso de esta herramienta podría propiciar que en las diferentes formaciones políticas acaben emergiendo nuevos liderazgos con especial habilidad para manejar los códigos de los directos, algo parecido a la que ocurrió en su momento con la eclosión de la televisión y la necesidad de que cualquier candidato tuviese la capacidad de manejarse bien ante las cámaras. 

De hecho, una de las cuestiones que destacan los investigadores en su estudio es la necesidad de que los profesionales de la comunicación política sean conscientes de que no se pueden replicar los contenidos de otras plataformas que usan con mayor soltura, como Facebook, X, Youtube o incluso Instagram, en los que prima el contenido y la interacción con los usuarios el diferido, para Twitch, ya que se hace necesario poner en marcha una narrativa diferente que permita conectar con la audiencia.

Comunicación política en la era de la polarización

Otro de los aspectos en los que hay que poner especial atención es en el tipo de mensaje que se genera y que se traslada, y más en una época de espectacularización de la política y de profunda polarización social. Hace mucho tiempo que los políticos «rehúyen el exceso de seriedad, puesto que han entendido que a menudo el votante se rige por factores emocionales más que por ponderaciones racionales», apuntan los autores del estudio, Núria Roca-Trenchs y los investigadores de la UOC Alexandre López-Borrull y Ferran Lalueza, todos miembros del grupo GAME. 

Twitch sería en este caso un paso más en ese concepto que es el politainment (acrónimo compuesto por las palabras política y entretenimiento en inglés). La necesidad de generar mensajes con calidad en el ámbito de las redes sociales es otro de los aspectos que destaca Roca-Trenchs. «Consumimos muy rápido y nos aburrimos muy rápido, por eso se han creado estos conceptos de politainment infotainment, porque es dar la información con un poco de entretenimiento y dar la política con un poco de entretenimiento. El riesgo que hay en ello es que los contenidos que consumimos no sean de suficiente calidad», explica la investigadora.

Una dieta mediática e informativa de calidad construye ciudadanía informada, también entre la juventud, que necesita sentirse escuchada y ver que la política se ocupa de los asuntos que son importantes para ella. Es más, se hace necesario que las generaciones más jóvenes entiendan que «ir a votar es importante porque los políticos que mandarán tienen la llave para la toma de decisiones».