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Veintiún barcos españoles han amarrado por la veda francesa para proteger delfines

Somos Mar REDACCIÓN / LA VOZ

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Planas aseguró en el Senado que habrá compensaciones adecuadas y justas a quienes se han visto perjudicados por la medida

07 feb 2024 . Actualizado a las 04:45 h.

De los 41 barcos españoles afectados por la veda que Francia ha decretado en el golfo de Vizcaya para tratar de reducir las capturas accidentales de delfines y otros cetáceos, 20 han optado por cambiar de caladero y otros 21 sí han amarrado por la veda. Fueron las cifras que ofreció el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ayer en el pleno del Senado, foro en el que reiteró el «firme compromiso del Gobierno con los pescadores y armadores afectados por la veda» hasta el 20 de febrero.

Planas recalcó que su departamento —que ha asumido el paro que Francia extendió a las flotas extranjeras aunque el sector cuestiona su capacidad para hacerlo— «está llevando a cabo un seguimiento continuo de la situación, con un diálogo transparente con el sector y las comunidades autónomas» para ver de qué forma se puede lograr una implementación efectiva de medidas que reduzcan la captura accidental de cetáceos y «dar una compensación adecuada y justa a aquellos que se han visto perjudicados por esta decisión».

Planas ha detallado que el cierre de esta pesquería no afecta a todos los buques que faenan en aquellas aguas, sino a aquellos con eslora superior a los 8 metros, de artes de arrastre de fondo a la pareja, cerco, artes menores de enmalle, volanta y rasco.

El ministro explicó que la flota pesquera española «defiende la sostenibilidad y las buenas prácticas» y, en consecuencia, el Gobierno de España tomó una serie de medidas para hacer más sencillo el control de las capturas. Sin embargo, la Comisión Europea estimó que estas medidas no eran suficientes, por lo que hubo que publicar otra orden que incorporaba al ordenamiento jurídico español la veda impuesta por Francia y que da cumplimiento al artículo 13.2 de la política pesquera común, «que se aplica por primera vez», sobre medidas de urgencia de los Estados miembros.

Aseguró que, de aquí al 20 de febrero, se estudiará en qué medida se han visto afectados los barcos y la posibilidad de financiar ayudas con cargo al Fondo Europeo Marítimo de la Pesca y la Acuicultura (Fempa), «pero no excluyo la posibilidad de utilizar algún otro mecanismo», porque «soy un ministro de diálogo dispuesto a seguir buscando soluciones para los pescadores afectados», concluyó.