Martes, 30 de Julio 2024, 13:50h
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El arzobispo de Turín quiso estar presente cuando el grupo de científicos recortó una pequeña porción del gran tesoro de la catedral: la sábana santa, el sudario que cubrió el cuerpo de Jesucristo. Tomaron un pedacito del lienzo y lo partieron en tres. Cada una de las partes se entregó a los representantes de las universidades de Oxford, (Inglaterra), Zúrich (Suiza) y Arizona (Estados Unidos). La muestra se tomó en medio de un riguroso ceremonial que quedó grabado en vídeo aquel 21 de abril de 1988.
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Stephanie Wilson