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El sueño de una televisión barata y sin anuncios llega a su fin

Vuelve el modelo tradicional...en streaming

El sueño de una televisión barata y sin anuncios llega a su fin

| Getty Images.

Netflix, Disney+ y Amazon Prime han incorporado planes con anuncios para sus usuarios. Para evitarlos, deben pagar una tarifa superior cada mes. El modelo de televisión tradicional parece ser el nuevo camino de las plataformas de 'streaming'. Y funciona... para ellas. Te lo contamos.

Martes, 13 de Febrero 2024

Tiempo de lectura: 3 min

Sin anuncios'. Esta era la premisa que ofertaban las diferentes plataformas de streaming sobre sus contenidos a la carta. Pretendían distanciar al consumidor de todo aquello a lo que la televisión tradicional le había acostumbrado. Ahora, Amazon Prime Video es la última en sumarse a la nueva ola publicitaria en este tipo de plataformas. Tras un colapso generalizado en sus modelos de negocio, incorporar la publicidad es la nueva ruta a seguir por la gran mayoría de ellas.

La decisión no es de ahora. En 2022, Netflix marcaba un antes y después en la historia de la compañía y creaba la antesala para lo que parece que es el futuro del contenido audiovisual de pago. A la oleada de críticas tras comunicar que haría pagar a los usuarios por compartir las cuentas con amigos y familiares, le siguió el anuncio del nuevo plan de suscripción más económico con la novedad de la inclusión publicitaria. Una estrategia que convirtió al ‘gigante’ en la primera plataforma en extenderlo a nivel mundial, aunque ya la habían adoptado otras plataformas como HBO Max en Estados Unidos.

La primera en adoptar este plan –Netflix– consiguió 13 millones de suscriptores nuevos en el último trimestre. De sus 260 millones de abonados, cuatro de cada diez han elegido el plan con anuncios

Disney+ también se sumó el año pasado. Y ahora, es el turno de Prime Video con una diferencia sustancial: desde esta semana, aplica los anuncios a todos los usuarios. Para poder disfrutar del contenido sin interrupciones tienes que abonar un suplemento de casi tres dólares. De momento, solo afecta a Estados Unidos, Canadá y Alemania, pero se espera que llegue a España a lo largo de este año en una segunda fase de expansión, según explica The Washington Post.

Los espectadores ya han mostrado su descontento a la decisión de la plataforma. Algunos de ellos cuentan en redes sociales que la publicidad interrumpe el contenido que se está viendo, sin tener en cuenta si es película o una serie y que muchos de ellos aparecen a mitad de la reproducción. Por supuesto, sin poder saltarlos.

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No sin mi serie. En España, según una reciente encuesta, el 46% de los adultos aseguran estar dispuestos a ver anuncios a cambio de ver sus series y películas favoritas en streaming.

¿Se acerca el fin de las plataformas? Pues, todo lo contrario. La primera en adoptar este plan –Netflix– ha conseguido más de 13 millones de suscriptores nuevos en todo el mundo en el último trimestre de 2023. Este es el mayor crecimiento de su historia, excluyendo la temporada de confinamiento. Actualmente, ya son más de 260 millones de abonados –de los cuales, cuatro de cada diez han elegido el plan con anuncios– y se posiciona como la única compañía de streaming internacional con beneficios.

Con Amazon se espera que ocurra lo mismo. O incluso, mejor. Según un reportaje de The Hollywood Reporter, esta nueva estrategia tendrá unos beneficios de entre 2.000 y 3.000 millones de dólares en tan solo un año y puede convertirse en la mayor plataforma de pago con anuncios en la industria.

De hecho, Justin Post, analista del Banco de América, estima que los ingresos generados estarán cerca de los 3.000 millones de dólares por los contratos publicitarios y casi 5.000 millones de dólares a través de los usuarios que pagarán para no ver anuncios. Eso sí, considera que la gran mayoría de ellos no pagarán por eliminar la publicidad.

Las empresas argumentan que este cambio estructural permitirá aumentar los presupuestos y crear contenido que realmente retenga a los espectadores. Amazon asegura que estos cambios servirán para «seguir invirtiendo en contenido atractivo y seguir aumentado esa inversión durante un largo período de tiempo».

Lo que está claro es que hacer televisión cuesta dinero. Y a los españoles, según un estudio de la tecnológica The Trade Desk, no le va a importar pagarlo. El 46% de los adultos aseguran estar dispuestos a ver anuncios a cambio de ver sus series y películas favoritas en streaming y un 21% se suscribiría a un plan más barato aunque contenga anuncios. Y comience a parecerse a la televisión 'de toda la vida'.


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