Miércoles, 05 de Abril 2023, 13:18h
Tiempo de lectura: 7 min
Han perdido las energías renovables el fulgor con que se las percibía hace solo unos años, cuando eran la solución potencial para reducir nuestra dependencia de fuentes fósiles y para reducir emisiones. Ahora que empiezan a ser una alternativa efectiva, y cada vez más importante, afloran los inconvenientes, los peajes y las servidumbres que aerogeneradores y paneles provocan en los territorios donde se instalan. El fenómeno, el descontento, ha llegado incluso al cine, gracias a dos de las cintas más celebradas del año pasado en España, Alcarràs, de Carla Simón, y As bestas, de Rodrigo Sorogoyen e Isabel Peña. Una lectora se suma en tono airado a las objeciones. Y, antes de descartarlas a la ligera, quizá deba analizarse si se están teniendo en cuenta todos los costes, cómo cabría reducirlos y su justo reparto.
-
1 La primera entrevista de Vargas Llosa en casa de Preysler: «Muchas veces el sexo es la tabla de salvación»
-
2 Pablo Chiapella: «Enfadado, tengo arrancada de caballo y parada de burro: se me pasa pronto»
-
3 Las calaveras despiertan: así funcionan las nuevas técnicas de reconstrucción facial
-
4 Los animales más repugnantes del mundo (y las razones de su fealdad)
-
5 Pódcast | El fenómeno ‘sugar daddy’ y su sombra sobre el caso de Daniel Sancho
-
1 La primera entrevista de Vargas Llosa en casa de Preysler: «Muchas veces el sexo es la tabla de salvación»
-
2 Pablo Chiapella: «Enfadado, tengo arrancada de caballo y parada de burro: se me pasa pronto»
-
3 Las calaveras despiertan: así funcionan las nuevas técnicas de reconstrucción facial
-
4 Los animales más repugnantes del mundo (y las razones de su fealdad)
-
5 Pódcast | El fenómeno ‘sugar daddy’ y su sombra sobre el caso de Daniel Sancho