Protección Civil se empleó a fondo cortando y retirando árboles

La Voz VIVEIRO / LA VOZ

A MARIÑA

CEDIDA

En Viveiro, por precaución, cerraron el acceso a dos calles

05 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Si bien, la noche del viernes al sábado no fue tan intensa como la anterior, en la mañana del sábado se evidenciaban aún los desperfectos tras otra madrugada en la que el viento sopló con fuerza. Desde primera hora de la mañana, voluntarios de Protección Civil recibieron llamadas para retirar varios árboles de las carreteras mariñanas.

Por la tarde, en Ourol, ya habían retirado una decena y en otras localidades como O Valadouro, Foz, Cervo o Barreiros también recibieron varios avisos por la caída de árboles que cortaban el paso en carreteras y pistas secundarias.

En Ribadeo, además, el viento tiró una farola en la calle Virxe do Camiño. Y en Rosalía de Castro se cayó la lona de protección de un edificio, yéndose contra otro al que le rompió parte de un alero y algunos tendales.

En Burela, los bomberos retiraban por la mañana unas chapas a medio caer de una fachada lateral en la Avenida da Mariña. El viento también desplazó varios contenedores.

El temporal también dejó marca en la marquesina de autobuses de Reinante y, también en Barreiros se cayó una valla a la carretera.

En Viveiro, se cortaron las céntricas calles Melitón Cortiñas y Vicente Cociña por el riesgo de desprendimiento de losas de los tejados de algunas casas.

Chapas de un polideportivo de Luarca volaron a decenas de metros de distancia

El temporal de viento se dejó sentir en el Occidente asturiano, ocasionando al igual que en A Mariña numerosas incidencias. Por ejemplo, las fuertes rachas provocaron que se levantasen parte de las chapas metálicas del techo del polideportivo del instituto Carmen y Severo Ochoa, en Luarca, ubicado en Villar, en la zona alta de la villa. Parte de las planchas salieron despedidas, pero por fortuna no golpearon a alguien. Como precaución, la policía local acordonó la zona. En principio, si el viento remite hoy no afectará a las clases.

También en Luarca el viento alteró la concentración convocada ayer por la mañana con motivo del tercer aniversario del temporal que destruyó el museo del calamar gigante. El lugar previsto para el acto era la plaza del ayuntamiento, pero ante el fuerte viento los asistentes optaron por trasladarse a la sala de exposiciones Álvaro Delgado, donde se leyeron los discursos reivindicativos. El museo del calamar, destruido hace tres años, no ha sido rehabilitado todavía.

Este temporal se ha dejado sentir con especial virulencia en localidades como Taramundi, donde la madrugada del jueves se registraron rachas continuadas de más de 120 kilómetros por hora.