El Galipizza Viveiro volvió a ganar tras 252 días de sequía

Iván Díaz Rolle
I. DÍAZ ROLLE VIVEIRO / LA VOZ

A MARIÑA

XAIME RAMALLAL

Balonmano | Sorprendió al Pabellón Ourense tras 15 derrotas

07 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Se hizo esperar demasiado, pero la primera alegría de la temporada para el máximo representante del balonmano en la provincia llegó por fin en su visita al Pabellón Ourense. Con su triunfo por 24-27 el Galipizza Viveiro deja atrás una sequía de 15 derrotas consecutivas oficiales. Habían pasado 252 días, algo más de ocho meses, desde su última victoria contra el Xallas en el play-off de permanencia en Primera, el 25 de mayo del 2019. Desde entonces, en el nuevo curso, los mariñanos perdieron sus tres partidos de Copa y otros 12 en la liga. La cuenta se detuvo en el 12+1 para eliminar todos los gafes de una tacada.

«Es un alivio ver que el trabajo de estos meses tiene recompensa», reconoce el entrenador de los mariñanos, un Aitor Freiría que este verano tomó el mando de un equipo profundamente reestructurado e inexperto. «Pese a las derrotas, el grupo nunca perdió el ánimo, siempre trabajó y creyó que llegarían los puntos. Teníamos plena confianza, solo nos faltaba un poco de suerte», aplaude a sus hombres el estratega porriñés.

Freiría espera que este triunfo suponga para los suyos un buen impulso anímico y no renuncia a pelear por la permanencia en la máxima categoría gallega: «Tendríamos que ganar varios partidos y esperar hasta final de temporada para saber realmente cuántos equipos descienden y quién juega la promoción -dependerá de los arrastres desde divisiones superiores-».

El entrenador del Galipizza tiene marcado para este sábado en casa el siguiente asalto a los puntos: «El partido contra Porriño es primordial si queremos mantener opciones de permanencia».

Doble compromiso

El del sábado a las 16 horas contra los porriñeses no será el único partido que jueguen los mariñanos este fin de semana. El domingo recuperarán la jornada aplazada contra el Culleredo, también en el Municipal viveirense: «Es un fin de semana complicado. Contamos con pocos efectivos, aunque tratamos de rotarlos mucho. El del Culleredo, además, será un partido muy complicado, que no es de nuestra liga y pretende entrar en la fase de ascenso».

Duelo entre hermanos

El sábado contra el Porriño Aitor vivirá una jornada especial porque su hemano Diego es jugador del rival: «Será la tercera vez que nos enfrentemos esta temporada».