La riqueza de las lenguas

César Aja

A MARIÑA

PEPA LOSADA

01 oct 2022 . Actualizado a las 19:38 h.

El curso escolar que se inicia lo hace con bastantes, problemas, desafíos y adversidades: aumento de costes de generalizados, subida general de los precios de bienes y servicios de todo tipo... Pero también, la aplicación de una nueva Ley de Educación, acompañada en algunos lugares de España de disputas, manifestaciones y judicialización de la educación que - en ocasiones - acaba en arduos litigios.

Al iniciarse la guerra de Ucrania hemos comprobado que muchos de sus ciudadanos hablan español, circunstancia también presente en otros muchos países del Este de Europa. Todos los países del antiguo telón de acero, incluida Rusia, albergan una significativa cantidad de población que habla nuestro idioma común. En parte por lo que esto les aporta como complemento cultural, pero también por el valor añadido que supone el conocimiento del español para numerosos alumnos de todos los niveles educativos de cara a su proyección laboral futura. Así, el conocimiento del español es considerado una excelente contribución para mejorar sus expectativas profesionales.

Las Consejerías del Ministerio de Educación (de España) en Polonia y Bulgaria junto al Instituto Cervantes del Ministerio de Asuntos Exteriores - además de las Cátedras de Español de las distintas Universidades - son los principales promotores de la lengua española en estos países.

El interés que suscita el aprendizaje del español en estas tierras, a mi juicio, tiene su origen en el nutrido intercambio que, en todos los ámbitos, Cuba mantuvo durante la época soviética con estos países, lo que motivó una importante divulgación del español, así como el interés que suscitaban los países del cono sur americano. Prueba de ello son los múltiples matrimonios mixtos de nacionalidad cubana con ciudadanos y ciudadanas de estas naciones, cuya descendencia es totalmente bilingüe. Un hecho que he constatado personalmente, al observar como una amplia proporción del profesorado de las Secciones Bilingües de Español tienen esta procedencia.

Son muchos los profesores españoles de distintas materias, quienes, becados tras un proceso de selección por parte del Ministerio de Educación, son contratados por los propios institutos de secundaria para ejercer la docencia en las seccione Bilingües de Español en los países acogidos a estos convenios. Más de 120 profesores (españoles) ejercen la enseñanza en los países a los que nos referimos. Concretamente, desde la Consejería de Bulgaria se coordinan 14 secciones en Bulgaria, 10 en Rumanía y 6 en Hungría. Asimismo, existen también otros centros públicos y privados no conveniados que igualmente incluyen el español incluso como primera lengua. Se añaden a estos, algunos Institutos en Turquía y Moldavia, además de numerosas universidades.

La demanda de este profesorado es enorme y cada vez más países e institutos solicitan el formar parte de las Secciones Bilingües de Español, y no por ello las administraciones públicas marginan o devalúan sus lenguas maternas. Pues entienden perfectamente cuales deben ser los servicios educativos que deben proporcionar a su juventud para que consiga la mejor capacitación para enfrentarse a los nuevos retos profesionales que se van a encontrar en el futuro.

No cabe ninguna duda de que un profesional que tenga conocimientos de un idioma que lo hablan más de 585 millones de personas en el mundo - de los cuales 50 millones lo hacen en USA - se encontrará en una excelente situación de partida para incorporarse al mercado laboral, así como desde un punto de vista de desarrollo intelectual y humano.

El Ministerio de Educación y el Instituto Cervantes, realizan una encomiable labor en todo el mundo en favor, no solo del español como lengua, sino también en todos los ámbitos relativos y relacionados con España, divulgando todo aquello que suscita interés por parte de la población respectiva.

César Aja Mariño. Ex-Consejero de Educación del Ministerio de Educación de España en Bulgaria, Hungría, Rumanía, Moldavia y Turquía.