Las desavenencias entre el Ribadeo FC y el Concello llegan al juzgado

José Francisco Alonso Quelle
josé alonso RIBADEO / LA VOZ

A MARIÑA

PEPA LOSADA

Las diferencias, con duros reproches por las dos partes, atañen al cobro de subvenciones de tres anualidades

10 dic 2022 . Actualizado a las 11:35 h.

La relación entre el club de fútbol del Ribadeo FC y el Concello pasa por su momento más delicado. Las desavenencias por el cobro pendiente de subvenciones municipales por el Ribadeo FC ha acabado en los tribunales, donde el club ganó la batalla jurídica, con el paso atrás dado por el Concello reconociendo que no se ajustó a derecho cuando de forma unilateral, y sin dar trámite de audiencia, decidó recortarle en 4.000 euros la subvención nominativa asignada en el 2020 (de 20.000 euros) por entender que el gasto no había sido debidamente justificado. El asunto acabó en el Contencioso-Administrativo de Lugo, con la reclamación presentada por el Ribadeo FC. El Concello, hechas las consultas pertinentes (al Consello Consultivo de Galicia), reconoció su error en la tramitación. Y así lo comunicó al juzgado hace un mes pidiéndole que, en consecuencia, archivase el procedimiento. Las costas fueron cargadas al Ayuntamiento.

Pero el Concello, aunque reconoce el error de forma que cometió, se mantiene firme en el fondo del asunto: el Ribadeo FC debe devolver el dinero cuyo gasto no justificó. Para facilitarlo, lo que ha hecho el Ayuntamiento ha sido descontarle los 4.000 euros de la subvención del año pasado. Le corresponderían 20.000 y cobrará finalmente 16.000.

El Ribadeo FC no está de acuerdo y acaba de presentar un escrito en el consistorio reclamando el pago de los 4.000 euros que faltarían del total de la subvención del 2020, los 4.000 que le fueron descontados de la ayuda del 2021 y los 20.000 euro que -en atención a los convenios de los últimos años- le corresponderían de este 2022 que está próximo a finalizar. 

El origen del conflicto

Desde la directiva del Ribadeo FC apuntan que el origen de las diferencias con el gobierno municipal se remontan a hace dos años, a la disputa del primer torneo Emma Cuervo femenino, que patrocinó la Xunta de Galicia y que disputaron el Bilbao y el Oviedo. Fue, dicen, un asunto menor, que se enrareció: «O alcalde non dixeriu ben que fora a secretaria de Igualdade da Xunta quen entregara o trofeo ó gañador», dicen. Y añaden: «Nós non entramos nas liortas políticas. O que parecen non querer entender é que eles son profesionais da política, que viven delo, mentres nós somos veciños que colaboramos co Ribadeo FC, non cobramos un euro, de feito ás veces temos que poñer cartos do noso peto, e conseguimos sacar ó Ribadeo FC do furado no que estaba. Se estamos aguantando agora é grazas ás empresas de Ribadeo que colaboran con nós. Pero se o Concello non nos ingresa os cartos a situación pode chegar a ser insostible».

También ha contribuido a enturbiar la relación que el Ribadeo FC periódicamente deba ir a campos de otros ayuntamientos para entrenar, al no poder usar el Pepe Barrera (lo normal es que se utilice solo para encuentros oficiales) y estar el municipal de A Devesa en obras (el Concello invierte 50.000 euros en su mejora). El equipo, que compite en Preferente Galicia, de cuando en vez recurre para entrenar al campo del campamento juvenil de A Devesa, que les cede la Xunta con otras instalaciones, pero tiene medidas de fútbol siete.

Fernando Suárez, alcalde de Ribadeo, insistió en que el Concello trata por igual a todas las entidades deportivas, si acaso primando al Ribadeo FC, que se lleva casi la mitad de los recursos que se destinan a ellas: «A directiva do Ribadeo igual está un pouco descentrada. Eu manexo diñeiro público, non é meu, é de todos, e ese diñeiro está sometido a regras e a control administrativo. Cando a alguén lle concedemos unha subvención e non o xustifica como debe, ten que devolver a parte correspondente. O contrario sería malversar diñeiro público».

De las declaraciones del alcalde se infiere que la relación no es precisamente fluida y que el acuerdo para superar este conflicto está lejano: «Tiveron que devolver 4.000 euros, e como non quixeron, leváronnos ó contencioso. Efectivamente, había un erro de forma, e anulamos o expediente. Pero volvemos a incoar outro, para que devolveran os 4.000 euros da axuda non xustificada. Accedemos a descontarllos da subvención do ano 2021, e agora tocará firmar, se queren, o convenio deste ano, que é voluntario e que como todos implicará unas obrigas para as partes e unha lealdade recíproca. Nós témola; eles non. Pero teño que dicir que vexo moita política de fondo, moito PP. E mesturar o deporte coa política non é bo».