La crecida del Eo fue notable en la zona limítrofe galaico-astur, con inundaciones y vías cortadas

y. g. A PONTENOVA/LA VOZ

A MARIÑA

CEDIDA

Por unas horas fue inaccesible el puente de Fondón en San Tirso o un tramo de la VE-2 en Vegadeo

03 ene 2023 . Actualizado a las 10:33 h.

La rápida crecida del Eo causó una noche de incertidumbre en la zona limítrofe galaico-astur, del domingo al lunes, aunque en el transcurso de la jornada del 2 de enero el nivel del agua finalmente fue bajando, trayendo calma a los vecinos. Aún así, se registraron zonas con inundaciones importantes, en las que el río llegó a cortar algún que otro vial como la VE-2 (Vegadeo) u obligar a hacerlo, por ejemplo, en el puente en la zona de O Fondón (A Pontenova), donde la madera y las ramas que fueron arrastradas por el cauce crearon en ese punto una especie de embalse, donde se iba acumulando agua y más agua. A la mañana siguiente, señalaron, ya quedaba plenamente reabierto ese tramo.

Clemente Martínez, alcalde de San Tirso de Abres, señalaba: «Foi unha riada potente pero afortunadamente xa baixou o nivel do río». En A Pontenova, indicó el alcalde Darío Campos, «a auga estivo a punto de cubrir a ponte de Fondón, polo que se cortou a carretera, por prevención». Señaló que se anegaron las áreas recreativas del municipio, sin ni siquiera poder verse las mesas de piedra pero «sen causar máis estragos» en dichos lugares, donde ahora sí quedan tareas de limpieza, indicó. Desde Vegadeo, el regidor local César Álvarez, comentaba en la tarde del lunes que «agora estamos mellor, xa se tranquilizou, pero chegou a haber bastante auga». Señaló que el agua alcanzó una zona habitada situada entre Vegadeo y Ría de Abres, quedando ciertas áreas cubiertas de lodo. Álvarez cree que «el problema de este año fue que llovió mucho y que coincidió con que también hay mucha madera cortada en el monte, bajando el agua por las pistas al río y que hizo que este año se inundaran las zonas más rápido».