
Desde aquel septiembre de 1987 en que aparecieron 5 toneladas de cocaína en una cala de Tapia de Casariego -y que fue entonces el mayor desembarco de droga en España- hasta hoy no han cesado las operaciones antidroga en estas aguas del Cantábrico. Esta misma semana se descubrieron 486 kilos de cocaína en una zódiac con cabina que naufragó en la costa astur de madrugada y quedaron flotando en el mar bolsas de deporte que en realidad eran fardos con cocaína. ¿Qué hacía una zódiac navegando de madrugada? Detrás, como informó La Voz, estaba una nueva operación de tráfico de droga de envergadura.
Podríamos recordar más operaciones en 2018 y antes, en 2021 (el Nehir), en 2023, cuando aparecieron flotando fardos con cocaína en aguas de Xove y de la costa asturiana y más. Y para luchar contra este tráfico constante de drogas por mar (y también por carretera a través de la A-8), está una embarcación de Aduanas de 1984 cuya vida de navegación tendría que haber acabado. Lo reclamaba meses atrás el diputado del BNG en el Congreso, Néstor Rego. No obstante, la labor de Vigilancia es encomiable y el resultado está ahí, se comprueba con los datos de aprehensiones.