El artesano del cuero que cambió Madrid por Foz y abre mercado con creaciones únicas

María Cuadrado Fernández
MARÍA CUADRADO FOZ / LA VOZ

FOZ

Cedida

Patrick Maroto compagina actualmente el trabajo artesanal con su formación como docente

14 jul 2024 . Actualizado a las 19:22 h.

La atracción que el mar ejerce se extiende por distintos territorios. También donde no huele a salitre. Patrick Maroto se sintió seducido y desde hace año y medio reside en Foz, donde compagina su trabajo como artesano del cuero, oficio en el que cuenta con una trayectoria de dos décadas, con su formación para conseguir un certificado de habilitación para la docencia.

Cambió el bullicio, los agobios y los atascos de Madrid por los azules y verdes de la comarca mariñana que le inspira en sus creaciones en esta nueva etapa personal y profesional. «Conozco Galicia porque en su momento una buena amiga artesana fue la que me la descubrió. Desde hacía algún tiempo me reconocía un enamorado del Norte y en un momento determinado me planteé venirme a vivir a Galicia. Ahora me siento satisfecho de haberme mudado aquí», reconoce el creador, que se formó en Barcelona, donde cursó el grado medio de Diseño en Artesanía en Cuero, estudió también en Granada una FP de Vestuario para teatro y en Madrid compatibilizó el trabajo en un establecimiento de venta de piel con el de monitor impartiendo talleres de artesanía durante siete años.

Fue en esa penúltima fase en la que, incluso hablando con su clientela, sintió la necesidad de un cambio: «Necesitaba mar urgentemente».

Ahora, frente a la inmensidad del Cantábrico, retrata algunas de sus creaciones, obras de autor y únicas en las que da rienda suelta a su creatividad. La evolución del artesano y diseñador Patrick Maroto se aprecia en sus creaciones. Como su vida, ellas también se enmarcan en diferentes etapas y en las mismas se distinguen unas u otras influencias.

Sus artículos están repartidos por distintos puntos de España e incluso por otros países, según explica el artesano, que también trabajó en una época en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.

Una amplia variedad de bolsos y complementos como cinturones, carteras, mochilas, agendas y otras piezas decorativas en cuero llevan su firma. Cada artículo es único, personalizado. También realiza arreglos.

«Yo soy artesano y necesitaba expresarme de forma artística. El cuero es un soporte que te permite diseñar y divertirte con el trabajo, y al mismo tiempo haces artículos que son funcionales», sostiene Patrick Maroto, que cuenta con clientes en Madrid y en otras provincias, y que sigue abriendo cartera en Galicia. Ha encontrado en las redes sociales un aliado a la hora de dar a conocer su trabajo y en esta nueva etapa escapa de las ferias: «Llevo mal que me regateen».

«A la hora de hacerme un encargo, si te gusta mi trabajo y me das libertad para trabajar, te va a gustar más el final, te quedarás más contento», reconoce. «La gente de Galicia me da mucha libertad para crear», asegura este artesano que también confiesa que cuando llegó a Foz no conocía a nadie en la localidad.

Ahora, ya asentado, se siente feliz, integrado, e incluso animado a seguir aprendiendo «a falar e a escribir en galego». Actualmente, en la fase de prácticas de su formación, confiesa su atracción por la docencia, por lo que el siguiente paso será compaginar también su trabajo de artesano con el de monitor de talleres, tanto para asociaciones como para Concellos.