Los lobos de mar de O Vicedo tendrán al fin la marquesina para sus tertulias

«En catro semanas espérase iniciar a obra» con la que Portos de Galicia hará realidad la promesa política que hace un año recibieron los lobos de mar jubilados que cada día se reúnen en el muelle de O Vicedo para compartir vivencias. Al fin han conseguido que les instalen la marquesina que les librará de torrarse al sol en verano y de soportar el viento o mojarse en invierno.

Portos confirma que la pequeña obra está en marcha. Este miércoles «asinouse a acta de replanteo» y, de no mediar imprevistos, a finales de marzo o a principios de abril ya tendrían donde guarecerse. No más tertulias a la intemperie para esos veteranos que a diario se reúnen en el puerto de O Vicedo.

Ahí, a la orilla del mar, en la ría, frente a los barcos atracados, seguirán conversando sobre los temporales del mar y de la vida que tantas veces capearon. Impenitentes, es su punto de encuentro preferido y a él acuden cuando el tiempo no lo impide. Aunque curtidos para aceptar casi todo como llegue, durante los últimos meses recordaron más de una vez que hace un año les dijeron que les harían un recinto para protegerles de las inclemencias meteorológicas. A principios de mes, su convecino Ricardo Barcón lamentaba que año y medio después de pedirlo por primera vez no estuviese listo. Ahora quedan semanas.

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