Loureiro iniciará con mayoría simple el quinto mandato socialista en un Concello con deberes pendientes hace años
09 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Mandará el PSOE con mayoría simple, pero los cinco grupos políticos comparten Viveiro como objetivo común. PSOE y PP suman 13 de los 17 concejales, aunque Por Viveiro, BNG y Son Viveiro pueden inclinar balanzas. Todos tienen la oportunidad de hacer realidad «que gañen todos veciños», como pidió la socialista María Loureiro, y «o inicio do cambio en Viveiro» que pronostica el candidato popular Óscar Rodríguez. ¿Sumarán por Viveiro, esforzándose por abrir puertas teóricamente amigas? Cada uno en el lugar donde lo sitúan las urnas, si reman juntos ese bote que es Viveiro navegará mejor.
«A veces el Concello va más lento de lo queremos en el gobierno local», reconocía Loureiro a finales del 2017. El 26M se quedó a 30 votos de la mayoría absoluta, en la segunda apuesta de los viveirenses por esta socialista, primera regidora en la historia del municipio. Inicia su séptimo año en la alcaldía con una pila de deberes, casi todos pendientes hace años. Cierto que, como repite ella, los más cuantiosos no dependen solo del Concello, sino, sobre todo, de la Xunta y del Estado, y con los otros se han ido apañando con el respaldo de la Diputación. También es cierto que sus rivales políticos le reprochan el estancamiento y la pérdida de peso de un Viveiro que se mueve por inercia, critican.
Gobierno y oposición coinciden en el diagnóstico de los principales problemas de la localidad más poblada de A Mariña, pero la cura la elige el PSOE y decide cuándo aplicarla, incluso si el PP, Por Viveiro, BNG y Son Viveiro se alían en su contra, excepto si apean al PSOE de la alcaldía.
A sus 38 años, avalada por 3.781 votos y ocho de las diecisiete concejalías, Loureiro y su gobierno tienen ante sí una larga lista de temas por resolver en el quinto gobierno consecutivo de la izquierda desde 1979. Desde ese año mandó la derecha hasta el 2003, cuando al PP lo derrocó una coalición PSOE-BNG, apoyada por IU. Dieciséis años después, el PP resiste como segunda fuerza, con menos votos que nunca pero con los mismos cinco ediles que en el 2015. Irrumpe Por Viveiro con dos concejalías, el BNG regresa con una y Son Viveiro conserva la suya.
Anuncios de Xunta y Estado
Dos días después de renovar la confianza del electorado, Loureiro solicitó una audiencia al presidente de la Xunta, Núñez Feijoo, con quien nunca ha mantenido una reunión bilateral. Desde el 2013, cuando suplió al fallecido Melchor Roel, a la máxima autoridad viveirense la recibió por primera vez un cargo estatal en Madrid el año pasado.
Con Feijoo la alcaldesa quiere «falar de asuntos de especial relevancia pendentes de resolución por parte da Xunta, e dos diferentes proxectos anunciados pola Xunta e polo candidato do PP á alcaldía durante a pasada campaña». De los primeros cita el plan urbanístico (en trámite desde el 2006), la circunvalación y la vía de alta capacidad San Cibrao-Ferrol (que el propio Feijoo prometió a principios de siglo comenzar por Viveiro) y el saneamiento de la ría (anunciado en el 2011 y que podría acabar en el 2022, como pronto). Y de los anuncios electorales menciona el coste del Conservatorio Profesional de Música (repetidamente intentado desde el Concello y negado por última vez hace tres años por el conselleiro de Cultura), la reconstrucción del barrio de Xunqueira y medidas para prevenir riadas como la que lo arrasó el pasado noviembre, el proyecto de mejora del vial Viveiro-Cabreiros (prometido para este año) y su posterior desdoblamiento, la creación del Museo de la Semana Santa o la reordenación de la fachada marítima desde el puente hasta Celeiro.
Qué preocupa a los vecinos
La campaña dejó otro compromiso, en este caso del Estado, en nombre del cual Adriana Lastra anunció un proyecto ya intentado sin éxito por Roel: retirarle a Portos la titularidad del muelle viejo y del espacio del antiguo casino para cederlos al Concello.
Otros deberes para el gobierno de Loureiro los citaron los 300 viveirenses entrevistados por Sondaxe en el sondeo electoral elaborado para La Voz. Por orden, las principales preocupaciones ciudadanas son la falta de empresas, el desempleo, las carreteras, el tráfico, el saneamiento y el suministro de agua, el abandono urbanístico, la despreocupación por las zonas rurales, el medio ambiente y la recogida de basuras o el transporte público.
El Concello, la mayor empresa
A los viveirenses les preocupan especialmente la falta de empresas y el paro. No en vano, porque el polígono industrial de Landrove tiene vacíos la mitad de sus 84.000 metros cuadrados, mientras en el de Xove se asientan firmas viveirenses. Además, en Viveiro están registrados como desempleados más de 800 de los 15.500 vecinos censados.
Gobierno local y oposición coinciden en apostar por el turismo en una localidad donde hostelería y comercio generan casi la mitad del empleo. Otras muchas pequeñas y medianas empresas pivotan alrededor de la pesca de Celeiro y, en menor medida, del sector forestal, y alrededor de cuatrocientos viveirenses trabajan en Alcoa y en sus auxiliares. La mayor industria de Viveiro es la eólica Vestas, con unos 170 contratados. Solo la supera el Concello, con unos 180 empleos directos, de los cuales unos 130 deberían salir a concurso, como acordaron todos los grupos políticos y los sindicatos. De las arcas municipales también cobran indirectamente concesionarias de servicios públicos como asistencia en el hogar, recogida de residuos, abastecimiento de agua, limpieza de edificios públicos, escuela infantil... ¿Qué puede hacer el ejecutivo de Loureiro para atraer empresas y generar riqueza? Durante la campaña se lanzaron muchas ideas, varias reiteradas a lo largo de los años, sin resultados. La socialista María Loureiro adquirió varios compromisos en su programa electoral.
LANDROVE
«Trataremos de impulsar accións para a implantación de novas empresas no polígono»
TURISMO
«Impulsaremos actividades promocionais para atraer o maior número de visitantes, Viveiro é un referente no turismo e máis do 50 % do emprego pertenece ao sector servizos»
PRODUCTOS
«Para as pymes, autonómos, comercios, sector agrícola, rural e pesqueiro trataremos de potenciar os seus produtos en foros e feiras»
Una ciudad aún muy lejos de casi todo
Viveiro sigue muy lejos de casi todo después de desviarse en Barreiros la Transcantábrica hacia el interior y después de dieciocho años esperando por la compensación, el corredor que discurriría por la costa desde Barreiros hasta Ferrol. Circulando por carreteras del siglo pasado, con un ferrocarril agonizando y unas líneas de autobús con frecuencias y conexiones que pueden suponer más de cinco horas para llegar a Santiago (unos 170 kilómetros de distancia), los viveirenses asisten con incredulidad al anuncio de un puente de 1.700 metros sobre la ría que costaría cien millones de euros, parte de la circunvalación comprometida a principios de siglo.
Debería faltar poco para conocer el estudio de impacto ambiental de una variante que retiraría el tráfico de paso del centro urbano y enlazaría con el único tramo de la vía de alta capacidad construido, el de Area-Xove, y con la LU-540, la Viveiro-Cabreiros que conduce al resto de Galicia y a la meseta. De la mejora de esta última (con siete nuevas zonas de adelantamiento, suavización de las curvas y protecciones para evitar la irrupción de animales) se habló mucho en la campaña, por iniciativa del candidato popular Óscar Rodríguez, quien también plantea doblar los carriles en un futuro. Como el presidente de la Xunta se comprometió «a presentar neste 2019 o proxecto e facer carriles de adiantamento na maior parte deste recorrido», la alcaldesa Loureiro quiere recordárselo porque es la principal vía de entrada y salida del municipio.
VARIANTE
«Seguiremos na loita de acadar unha estrada de circunvalación e vía de altas prestacións, así como a conexión de Viveiro coa autovía de Vilalba a Ferrol, coa mellora integral da LU-540»
CALLES
«Continuaremos co arranxo das rúas que faltan no casco histórico, así como as do Paraíso, igrexia de Covas, avenida de Vilalba e entorno, arribada de Celeiro, estrada de Pénjamo...»