
La afición todavía le da vueltas a la actuación de Conde ante el Barça
10 abr 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Con el paso de las jornadas ha subido el nivel de ruido en torno a los arbitrajes del Obradoiro Blusens Monbus. Durante meses, ni el club, ni el cuadro técnico ni los jugadores alzaron la voz para quejarse o expresar descontento. En las tres últimas semanas, solo los entrenadores se han mantenido firmes en esa dinámica. Y, entre la afición, el descontento ha ido in crescendo, hasta tocar techo en el partido ante al Barça.
En su momento fue el director general, José Luis Mateo, el que cuestionó las pocas faltas que se le pitaban a Corbacho. En Gran Canaria, Kendall se ganó su primera técnica, desesperado al ver que no le indicaban una sola falta.
Todos esos detalles han ido dejando poso. Y el domingo, Antonio Conde, sobre el que la grada tenía puesta la lupa por el partido Joventut-Obradoiro, acabó por encrespar a la afición.
En aquella ocasión, a falta de seis segundos Andrés Rodríguez se anticipó, robó el balón y Soto pitó. Tras dialogar con Conde, dio saque de banda y se disculpó por haber pitado. El equipo se quedó sin una opción de contragolpe y perdió.
El domingo, Conde corrigió en tres ocasiones a sus compañeros. La última, a falta de seis segundos, con 69-67. Sacristán no concedió una canasta de Tomic ante Kendall, por entender que la personal había sido previa a la acción de tiro. Pero Conde lo reconvino y marcó, ostensiblemente, la validez del lanzamiento y el tiro adicional. Y después, en la prórroga, pasó por alto una personal de Wallace sobre Corbacho que podía haber supuesto el empate a falta de medio minuto.
Son decisiones que probablemente hubiesen tenido otro calado de haber entrado el lanzamiento de Hummel sobre la bocina. O si se hubiesen adoptado en momentos no tan determinantes.
Quizás lo que resulta más difícil de entender es que Ingles acabara sin ser descalificado, por la reiteración en las provocaciones después de que le pitasen técnica a él y a Salah Mejri. O que de las 48 faltas del partido, veinte las indicase Conde, con un reparto de catorce para el Obradoiro y seis para el Barça. Entre Sacristán y Perea indicaron 28, trece a los locales y quince a los visitantes. Y también es cierto que el Obra ha ganado esta temporada un partido arbitrado por Conde, el de Sar frente al C.B. Canarias. En todo caso, tanto ha sido el ruido por el arbitraje del domingo que ha quedado en un segundo plano el extraordinario partido del equipo ante el Barcelona. El club prefiere pasar página y poner toda la atención en la visita a la cancha del Real Madrid. Con ese norte reanudó el equipo el trabajo.