Eimantas Bendzius llega al Obradoiro, Corbacho se aleja

Manuel García Reigosa
M. G. REIGOSA SANTIAGO / LA VOZ

ANDAR MIUDIÑO

SANDRA ALONSO

El alero lituano es el primer fichaje del nuevo proyecto y firma por dos campañas

04 jun 2015 . Actualizado a las 13:47 h.

El Obradoiro ha realizado su primer movimiento para la temporada 15/16. Hace tiempo que venía siguiendo al alero lituano Eimantas Bendzius, que finalmente ha dado el visto bueno a la propuesta santiaguesa por dos temporadas. Al propio tiempo, el gran referente del equipo en el último lustro se aleja. Alberto Corbacho anhela jugar en un conjunto de Euroliga, y ese es su principal objetivo para este verano. Su posible marcha no está ligada a la nueva contratación, aunque ambos jugadores comparten etiqueta de grandes tiradores.

Bendzius recala en Sar con la intención de seguir progresando. Fue internacional en las selecciones sub 19 y sub 20. Y en el verano del 2014, después de dos campañas en el Lietuvos Rytas, decidió dar el salto a la liga polaca, en busca de minutos. Firmó por el Trefl Sopot, en el que ha promediado 27 minutos, 14,3 puntos (51,2% en tiros de dos, 41,4% en triples y 80,2% en libres) y casi cinco rebotes.

El director general del club, José Luis Mateo, destaca «la polivalencia y el tiro» del nuevo fichaje. Osvaldas Matulionis, alero lituano que esta temporada ha defendido los colores del Breogán, reconoce que en los dos últimos años le ha perdido la pista a su compatriota. Pero lo recuerda como «un gran tirador» que no sobresalía por su fortaleza física.

El perfil de Bendzius es el de un tres que también puede manejarse, si las circunstancias de partido lo requieren, como un cuatro. No es, por tanto, un jugador intercambiable con Corbacho.

El alero balear, por vez primera en cinco años, está pendiente de resolver en qué equipo jugará la temporada próxima. Fue una de las primeras piezas del proyecto de la LEB. Y, desde entonces, el jugador y el equipo han crecido a la par. Cuando llegó, pertenecía a la clase media en la escala salarial. En la campaña que acaba de concluir estaba en cabeza.

La pasada temporada el Obradoiro le planteó la opción de renovar su contrato, como había hecho con anterioridad en dos ocasiones. Pero Corbacho prefirió no entrar en negociaciones.

Con treinta años se le presenta un dilema: reafirmarse como emblema en Sar o arriesgar en busca de un destino con rango de Euroliga. Ese es su deseo y así lo ha manifestado.

En ese escenario, el Obradoiro ha optado por hacerse a un lado y esperar. Dado que es el equipo que le dio la alternativa en la ACB, tiene la posibilidad de incluirlo en el derecho de tanteo una vez que acabe la Liga Endesa, ofreciéndole un 70 % del contrato percibido este curso.

Si Corbacho presenta una oferta mejor de otro club, el Obradoiro tendrá diez días para decidir si la iguala o le abre las puertas. Queda un mes largo por delante hasta ver si se separan los caminos tras cinco años de éxitos compartidos.