El Obradoiro fue un equipo blando en Málaga: 91-79

ANDAR MIUDIÑO

Carlos Guerrero LOF

Jaime Fernández gobernó el partido con una autoridad incontestable

19 sep 2021 . Actualizado a las 22:03 h.

El Monbus Obradoiro vivió un estreno de Liga Endesa aguado. No encontró la manera de frenar al Unicaja de Málaga, en especial a Jaime Fernández, quien gobernó la contienda de manera incontestable. Lideró el despegue andaluz en el segundo cuarto y apareció de nuevo en el último, cuando los visitantes se habían acercado a nueve. Los compostelanos estaban sobre aviso, pero no encontraron el antídoto.

Moncho Fernández empezó con Zurbriggen al volante. Es el base que jugó más minutos en pretemporada y se ganó salir en el cinco inicial, pero arrancó espeso y en apenas un par de minutos, y tras dos canastas fáciles de los locales, el técnico santiagués optó por darle la batuta a Hobbs.

Con el base americano el equipo ganó fluidez en ataque. Y con Ellenson muy inspirado, autor de diez puntos en el primer cuarto, el Obra le dio la vuelta al marcador y se puso seis arriba.

No estaba excesivamente fino atrás, concediendo puntos sin mucha oposición a un rival que apuesta por un baloncesto muy vertical, al que le gusta anotar en los primeros segundos de la posesión. El Unicaja, sin sacar brillo a su principal recurso de ataque, el triple, cerró los diez minutos iniciales cuatro arriba: 23-19.

El segundo acto arrancó con dos robos de balón visitantes que propiciaron la igualada. Durante unos minutos los dos equipos intercambiaron canastas. Y de repente, con un 29-28 en el electrónico, el Obradoiro colapsó.

Jaime Fernández se adueñó del partido. Nadie fue capaz de pararlo en defensa y se fue al descanso con 15 puntos en su haber y un solo fallo en el tiro. A la par, aparecieron los triples andaluces, cuatro hasta el intermedio que hicieron mucho daño.

En ataque, al Obra no le salía nada. Dos personales seguidas de Birutis, otras dos pérdidas de balón, posesiones que se consumían sin siquiera un tiro al aro... Tampoco ataba bien el rebote.

Los malagueños superaron en un visto y no visto los diez puntos de diferencia y la elevaron a catorce con un triple sobre la bocina de Francis Alonso para cerrar veinte minutos de baloncesto en los que marcaron el ritmo y llevaron la iniciativa: 49-35.

Excepción hecha de Ellenson en el primer cuarto, nadie salía al rescate del Obradoiro. Si acaso, Zurbriggen, que tiró de raza después de su arranque dubitativo. Y después también emergió Viny Okouo.

El tercer cuarto arrancó de la peor manera posible para los intereses compostelanos: dos triples que no entraron y dos pérdidas de balón. En el otro lado, un triple de Cole, otro de Bouteille, la diferencia en veinte puntos y tiempo muerto de Moncho Fernández.

Katsikaris empezó a administrar fuerzas, dio descanso a Jaime Fernández, Bouteille y Eric, y el Obra contestó con un parcial 0-6 que llevó al entrenador griego a pedir tiempo.

El Obradoiro se fue metiendo en el partido poco a poco y llegó a bajar de los diez puntos en el último cuarto. Pero Jaime Fernández frenó la reacción con cinco puntos consecutivos y el Unicaja volvió a volar: 83-60.

El colectivo de Moncho Fernández tiró de una de sus señas de identidad, la de no bajar nunca los brazos a pesar de que la remontada era ya imposible. Okouo fue el que mejor aprovechó la situación para firmar un expediente notable. Y al final la diferencia se quedó en doce puntos.

El calendario no da tregua. El viernes visita Sar el Joventut y el domingo el Obra jugará en la pista del Real Madrid.

Ficha técnica

Unicaja de Málaga 91: Jaime Fernández (22), Cole (14), Bouteille (18), Barreiro (4) y Eric (10) -cinco inicial-. Vicedo, Alberto Díaz, Francis Alonso (6), Abromaitis (11), y Nzosa (6).

Monbus Obradoiro 79: Zurbriggen (10), Robertson (10), Scrubb (9), Ellenson (17) y Birutis (4) -cinco inicia-. Okouo (17), Hobbs (3), Oliver, Beliauskas (2), Álvaro Muñoz (2), Filipovity (2) y Álex Suárez (3).

Parciales en cada cuarto: 23-19, 26-16, 18-20 y 24-24.