Contra uno mismo y sus circunstancias

Mozan Rivera

ANDAR MIUDIÑO

XOAN A. SOLER

24 may 2023 . Actualizado a las 21:45 h.

Siempre he creído que la más difícil de las competiciones que tiene que afrontar un equipo durante una temporada no es la marcada por la Liga Endesa sino aquella que juegas contra ti mismo y tus circunstancias, tanto a nivel individual como a nivel colectivo.

La primera de esas competiciones se disputa cada siete días y, entre cita y cita, hay tiempo más que de sobra para saber gestionar las sensaciones que te ha dejado ese enfrentamiento según el resultado sea favorable o contrario y cómo prepararte para el siguiente rival.

Pero la segunda se juega cada día. En esta, es fundamental el control del tiempo para resolver con éxito situaciones que, inevitablemente, van surgiendo en un abrir y cerrar de ojos, con la intervención de factores que muchas veces no dependen de ti. Requiere observación, viveza, tacto y sigilo. No sería la primera vez que un barco se hunde por un boquete creado desde el interior.

En esa competición del día a día, la invisible, la que no depende exclusivamente de la chequera, el Obradoiro de Moncho Fernández siempre es solvente. Si tuviese clasificación, estaría en play off y, además, con el factor campo. Como cada año.