El escolta lucense, Nacho Varela, Alonso Grela y Félix Alonso compartieron la jornada con alumnos del Colegio de Ponte Carreira
31 ene 2025 . Actualizado a las 19:07 h.Hace un año el Monbus Obradoiro descubrió una reserva de fieles aficionados en el Colegio Público de Ponte Carreira, ganador del concurso convocado para elegir las ilustraciones que serían utilizadas en la campaña de captación de socios protectores. Organizó allí una jornada con Moncho Fernández, Pustovyi, Guerrero y Howard, previa al partido ante el Real Madrid. Todo lo que recibieron fue afecto y ánimo.
La experiencia no cayó en saco roto y se ha repetido este año. Hasta el centro escolar se desplazaron Félix Alonso, Nacho Varela, Sergi Quintela y Alonso Grela, que se enfrentaron a las preguntas de la jovencísima audiencia.
En el turno de firma de autógrafos pudieron comprobar que el equipo, ahora en Primera FEB, mantiene su tirón. Había muchas camisetas de esta temporada. Alguna también entre el profesorado, que esperó a que concluyese el desfile de los alumnos para llevarse también su firma en la indumentaria.
La pregunta que causó más impacto llegó en mitad de la sesión, a bocajarro: «¿Sergi Quintela, qué prefieres, el Breogán o el Obradoiro». El escolta demostró cintura y confesó su cariño por los dos clubes, uno, en el que creció, «su casa», y el otro, el actual, en el que está disfrutando.
El intercambio de preguntas y respuestas también puso sobre el tapete el nombre de los jugadores que son muy del gusto de la representación obradoirista: Alonso Grela se quedó con el Chacho Rodríguez y Luka Doncic; Félix Alonso, con Fernando Martín y Larry Bird; Nacho Varela, con el «el Kevin Durant de la etapa de Oklahoma» y Campazzo; y Sergi Quintela, con un escolta que dejó huella en el Breogán, Charly Bell.
Hacia las dos de la tarde sonó el timbre, que a veces cambia la sirena por una canción. Hace un año la visita coincidió con la Semana del Libro, y lo que se podía oír era la letra de «Cuéntame un cuento». En esta ocasión lo que sonó fue el Miudiño. También retumbó en el aula el «O-B-R-A todos xuntos Obrá» para despedir a la comitiva. Y antes de poner fin a la jornada, la tradicional foto de grupo con estudiantes y docentes.