El vestuario prefiere mirar hacia dentro y evitar las cuentas de la lechera
30 mar 2025 . Actualizado a las 19:28 h.El Monbus Obradoiro solo ha perdido un partido en la segunda vuelta, el de Burgos ante el San Pablo. Esa buena racha no le ha bastado, hasta la fecha, para meterse entre los cinco primeros, entre los equipos que disfrutarán del factor campo en el play off. Pero la derrota del Palencia en Zamora acerca al colectivo de Félix Alonso a la quinta plaza. Está a una victoria del conjunto morado, este miércoles recuperará el partido de Torrelavega ante el Cantabria, el domingo jugará en Morón y el sábado 12 recibirá en Sar al propio Palencia.
El vestuario prefiere aparcar el cálculo de probabilidades y cualquier tipo de cuentas, y concentrar todos los esfuerzos en mantener la línea ascendente que viene mostrando el equipo en las últimas jornadas. Al propio tiempo, los jugadores reconocen que se hará raro afrontar una contienda como la de este miércoles, que empezará dónde quedó cuando se suspendió el choque, en el minuto tres del segundo cuarto con el marcador 19-26 a favor del conjuntos santiagués.
Millán Jiménez
En este marco encuadra su reflexión Millán Jiménez: «Es verdad que seguimos un poco la clasificación, pero no pensamos en cómo tenemos que quedar o lo que va a pasar. Al final, vamos a jugar play off y va a ser difícil, sea con quién sea. Si podemos asegura el factor cancha, mejor, pero vamos partido a partido. Ahora el de Cantabria es el que tenemos delante, y no pensamos más allá».
En términos similares se manifiesta Sergi Quintela, uno de los veteranos de la plantilla, al analizar la mentalidad del Obradoiro: «Desde Navidad, prácticamente, sabemos que teníamos que ir al play off. Lo que de aquella era malo, al ver que estábamos descolgados, pues ahora es bueno, porque ya sabíamos que iba a ser una temporada más larga de lo que nos gustaría y llevamos pensando en los play off desde entonces». Dibuja con nitidez el que, a su juicio, debe ser el plan de ruta: «Tenemos que seguir mejorando partido a partido para llegar lo mejor posible».
Los dos coinciden en que la defensa es uno de los mejores termómetros para medir las posibilidades del equipo. «Creo que tiene mucho mérito lo que estamos haciendo, el saber jugar durante todo el partido con una intensidad más o menos fija», apunta Quintela. Y pone el ejemplo del último partido para subraya la importancia de no bajar la guardia: «Al final, en un par de minutos en los que tenemos un poquito de dudas o que parece que no estamos con la misma intensidad, ellos vuelven a meterse en el partido y está liga es así. A seguir jugando todos juntos, un juego coral, y a seguir sumando».
Millán Jiménez también apela a la solidez en la contención: «Cuando defendemos es cuando sacamos las diferencias más grandes. Creo que si estamos bien atrás luego es todo más fácil delante, y se ha visto contra el Castelló, que cuando hemos sacado las diferencias ha sido en esos momentos en los que hemos estado mejor atrás».