ENTRE LÍNEAS
08 dic 2006 . Actualizado a las 06:00 h.UN TORNADO arrasa cientos de viviendas en Londres. En la costa mediterránea francesa los vientos huracanados no dejan nada en pie a su paso. En Roma, sin embargo, viven en primavera en pleno diciembre y en los Alpes ya no hace frío y no hay nieve. A esta retahíla no voy a sumar el tifón de Filipinas ya que, aunque trágico, es habitual por esos lares, pero no me negarán que el mundo parece haberse vuelto loco. Vamos, que lo que nos ha pasado en Arousa y más especialmente en Vilagarcía no es cosa única ni puntual. Señores y señoras, es el cambio climático. Ha empezado y nos va a hacer la vida imposible. Muy probablemente, sus hijos y los míos vivan en un planeta de climas extremos y naturaleza desbocada. ¿Qué de quién es la culpa? Suya y mía, que seguimos sin echar a la hoguera a los que no firman el protocolo de Kioto.