La Diputación quiere exportar a otros viales del rural el proyecto de calmado del tráfico ejecutado en O Grove
22 feb 2019 . Actualizado a las 05:00 h.La Diputación ha conseguido mejorar notablemente la seguridad vial en la carretera que conduce a la iglesia de San Vicente, «unha corredoira de apenas cinco metros de ancho na que dous coches tiñan que manobrar», explicó el director de la obra. En su lugar se han construido sendas peatonales de entre dos metros y medio y tres de ancho y una zona de convivencia entre peatones y coches en la que los primeros tendrán preferencia. «Esto parece o Manhattan do século XXI», aseguró la presidenta de la Diputación, Carmela Silva, que ayer visitó la zona acompañada del diputado de Mobilidade, Uxío Benítez, y del alcalde de O Grove, José Cacabelos. «Este proxecto vai ser un exemplo de como debemos actuar en estradas desta mesma tipoloxía», aseguró Benítez.
Cacabelos aprovechó la ocasión para recordar que los vecinos de San Vicente llevaban años esperando por esta mejora, «por iso foi unha das primeiras obras que quixemos sacar adiante», De ello dio fe también Benítez, quien recordó que el regidor le planteó esta obra al poco de llegar al cargo. Insistió en que la reforma del vial de San Vicente cumple las cuatro condiciones que debe seguir cualquier proyecto de estas características: facilitar un calmado del tráfico, que las sendas peatonales tengan un ancho mínimo de 2,5 metros, que cuando resulte imposible hacer aceras se construyan plataformas con preferencia para los peatones y que incluyan la mejora de los elementos patrimoniales de la zona, como en este caso la iglesia de San Vicente. Por eso aseguró que este proyecto será exportado por la entidad provincial a otras zonas de la provincia de similares características.
Por su parte, la presidenta de la Diputación calificó de «incomprensible» el aspecto que ofrecía este vial hasta que su gobierno decidió actuar en él. «Hoxe aquí se amosa que aquel modelo que a Deputación implantou hai catro anos é un relato da provincia que queremos. E tiñamos moi claro que queríamos unha provincia na que as persoas foran o centro de todo», argumentó.